Consejos básicos sobre el uso de sillitas infantiles en el coche
Siempre que se viaja en coche con menores, hay que respetar las normas y pautas que marcan los expertos y conducir de forma tranquila y relajada, sin agresividad ni brusquedades, manteniendo siempre la distancia de seguridad y ajustando la velocidad a las circunstancias del tráfico.
Todo ello, principalmente por la seguridad de los niños y niñas, y no tanto por evitarnos una multa. De hecho, según la Dirección General de Tráfico (DGT), el 75 % de las muertes infantiles y el 90 % de las lesiones graves en la carretera se pueden evitar si los más pequeños viajan de modo correcto en el coche, en asientos especiales y con las medidas adecuadas.
De ahí que tampoco ni una de las recomendaciones acerca de las sillitas infantiles que hace la Alianza Española para la Seguridad Vial Infantil (AESVi) en los desplazamientos con niños haya que pasarlas por alto. ¿Cuáles son?
➡️ Usar un sistema de retención infantil homologado y adaptado
Es obligatorio que utilicen un sistema de retención infantil (SRI) homologado y adaptado a la talla y peso todos los peques con una talla inferior a 135 centímetros. Para los más mayores, es aconsejable no quitar el respaldo a la silla hasta que tengan esa altura. Y no te olvides de que los especialistas recomiendan que vayan en sillitas infantiles hasta que midan 1’5 metros.
➡️ No utilizar sillas de segunda mano
A pesar del alto precio de los SRI (con un 21 % de IVA, siendo un producto esencial), no conviene comprarlos o pedir prestados a otras familias. Un estudio realizado por AESVi demuestra que 9 de cada 10 sillas adquiridas en el mercado de segunda mano no cumplirían hoy con el reglamento de seguridad con el que fueron aprobadas. Si es tu caso, debes saber que la seguridad de tu hijo está gravemente comprometida.
➡️ Emplear de modo correcto la silla infantil
Para instalar el SRI se deben seguir estrictamente las instrucciones del fabricante y el etiquetado. En caso de duda, pide ayuda al vendedor. Verifica su anclaje: debes asegurarte de que los arneses y cinturones no presentan holguras ni están revirados y van bien abrochados y tensados al cuerpo.
Los menores deben ir obligatoriamente sentados en los asientos traseros, salvo cuando el vehículo no disponga de ellos, ya estén ocupados por otros menores o no sea posible instalar en ellos todos los sistemas de retención infantil.
Además, conviene que viajen en sentido contrario a la marcha hasta los 4 años y, obligatoriamente, hasta los 15 meses. Lo idóneo es que sea en la plaza central trasera y desactivado el dispositivo del airbag.
⚠️ Viajar con un niño sin su correspondiente SRI (o cinturón de seguridad en el caso de niños mayores) o usarlo de forma inadecuada tiene una misma sanción, según la Ley de Tráfico: cuatro puntos menos en el permiso y una multa económica de 200 euros que recae en el conductor del vehículo o, en su defecto, en su titular.
Viajar en el coche sin el abrigo puesto
Pero la recomendación de utilizar correctamente el SRI tiene mucha relación con otro consejo que recuerdan los expertos en seguridad infantil y que a menudo padres y madres no tienen tanto en cuenta, sobre todo en los viajes cortos. Y eso que el 80 % de los accidentes mortales ocurre en desplazamientos cortos, cuando bajamos más la guardia y nos relajamos, porque “bah, solo son unos minutos” y “enseguida llegamos”.
¿Cuál es el consejo? En el coche el menor debe viajar siempre sin abrigo o sin ropa muy gruesa. “Llevar prendas de abrigo impide que el arnés o el cinturón vayan correctamente ajustados al cuerpo del niño, lo que podría disminuir de forma importante la eficacia del sistema de retención infantil”, comentan desde la Alianza Española para la Seguridad Vial Infantil (AESVi). Y es que dejárselo puesto, según distintas investigaciones, incrementa hasta en un 80 % las posibilidades de que el pequeño salga despedido del vehículo en una frenada brusca y tan solo a 50 kilómetros por hora.
👉 Por qué es peligroso llevar a los niños con abrigo
Y da igual si la sillita va a favor como en contra de la marcha. “Los arneses han sido diseñados para retener al niño en unas condiciones de tensión y ajuste en todas las condiciones de choque y vuelco. Tanto los test con dummies, como todas las pruebas descritas en los reglamentos europeos ECE R44 y ECE R129, se realizan con los cinturones o arneses con una tensión determinada. En todos los casos la falta de ajuste de estos cinturones podría provocar una excursión (desplazamiento) del niño peligrosa, efectos de submarining, aceleraciones superiores o incluso la eyección del niño por falta de una correcta sujeción en las fijaciones de hombros o clavículas”, apunta la AESVi .
Los abrigos o las prendas voluminosas generan un volumen falso en el tórax del menor, por lo que nos vemos en la obligación de añadir centímetros de holgura a los cinturones y arneses del SRI. De este modo, por el acolchado no se ajustarían a su cuerpecito y alterarían su capacidad de retención en caso de accidente.
En concreto, aumenta la posibilidad de que se produzca el llamado “efecto submarino”, es decir, que su cuerpo se escurra por debajo de la banda abdominal. Además, el material de estas ropas de abrigo también tiene su importancia. En su mayoría, es impermeable y resbaladizo, lo que incrementa el riesgo de deslizamiento.
Y el hecho de que los niños lleven abrigo resulta especialmente perjudicial en las colisiones frontales. Hay más posibilidades de que salgan despedidos por el impacto y choquen contra el respaldo del asiento delantero u otro elemento del coche, ocasionándoles graves lesiones.
Cómo viajar con niños si hace frío en el coche
Por tanto, aunque te parezca un engorro, haz que tu hijo siempre utilice la silla infantil en el coche (o el cinturón) sin la prenda de abrigo puesta. Pero no porque haya multa. “Teniendo en cuenta que los cuerpos y fuerzas de seguridad con competencias en materia de tráfico no han sido formados en el correcto uso de los SRI, es muy improbable, y poco recomendable que sancionen por este motivo”, reconocen desde AESVi. Hazlo por su seguridad. Y para ello, ten en cuenta estas otras recomendaciones:
- Mantén una temperatura adecuada y confortable dentro del vehículo, que estaría entre 21 y 23 °C.
- Lo idóneo es que los peques lleven ropa cómoda, transpirable y ligera. Pero si fuera necesario, ponles encima la ropa de abrigo o usa una manta.
- Subir la calefacción para evitar el frío no resulta una buena idea: una mayor temperatura empañará los cristales y hasta puede provocar somnolencia al volante.
- Predica con el ejemplo. Conducir con abrigo tampoco no es recomendable, pues resta libertad de movimientos, además de interferir en el correcto funcionamiento del cinturón de seguridad. De hecho, dependiendo del agente de la autoridad encargada de la vigilancia del tráfico, conducir con ropa de abrigo puede ser considerada una infracción leve, sancionada con una multa de 100 euros.