A la hora de amamantar, lo importante es encontrar una o varias posturas en las que tanto el lactante como la madre se sientan cómodos. La ‘Guía para las madres que amamantan‘, publicada por el el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, hace algunas recomendaciones para facilitar el agarre del bebé y el vaciado adecuado del pecho. Repasamos los principales aspectos que hay que tener en cuenta en la práctica de la lactancia materna para asegurar el bienestar de la madre y de su hijo, porque todo son ventajas en esta forma de alimentar a los más pequeños.
Buena postura para dar el pecho
- ? La madre debe recostarse ligeramente hacia atrás para facilitar el amamantamiento.
- ? El cuerpo del bebé tiene que estar en estrecho contacto con el de la madre. La cabeza debe estar colocada frente al pecho, con el pezón a la altura del labio superior-nariz. Es preferible acercar el pequeño al pecho, en lugar de que se mueva la madre.
- ? La cabeza y el cuerpo del bebé tienen que estar bien alineados: el cuello no debe estar flexionado, ni la cabeza girada.
- ? Resulta muy útil el llamado “afianzamiento espontáneo” (o agarre espontáneo), que consiste en colocar al lactante con su nariz a la altura del pezón y el mentón apoyado en el pecho. El niño echará la cabeza hacia atrás para buscar el pezón y abrirá la boca. Es normal que necesite varios intentos antes de conseguir agarrar espontáneamente el pezón. Es preciso dar tiempo al bebé hasta que lo logre, sin que la madre se precipite a metérselo en la boca. Bastará con ayudarle, si tiene dificultades.
Posiciones de lactancia materna
La ‘Guía para las madres que amamantan’ describe varias posiciones y su utilidad, según qué casos. Estas son algunas:
?? Posición de cuna
Es una de las más utilizadas: se apoya la cabeza del bebé en el antebrazo (no en el pliegue del codo), y la mano en su espalda (no en las nalgas).
?? Posición de rugby
Esta postura es u?til para las madres a las que les han practicado una cesárea, tienen las mamas grandes, necesitan vaciar la zona externa de la mama o amamantan a mellizos o gemelos de manera simultánea. Hay que sujetar el cuerpo y la cabeza del bebe? con el antebrazo y la mano del mismo pecho que se ofrece, de forma que su cuerpo quede al costado y sus pies hacia la espalda de la madre. Se coloca su cabeza frente al pecho con el pezo?n a la altura de la nariz-labio superior.
?? Recostada de lado
Hay que tumbarse de lado en la cama y colocar al pequeño con su cabeza apoyada en el colchón, frente a al pecho. Se desplaza al bebé hasta que su nariz-labio superior queden a la altura del pezón y se espera a que se agarre espontáneamente.
¿Qué es el agarre dirigido?
Si no se consigue el agarre espontáneo, puede ser útil el agarre dirigido. Una de las técnicas más empleadas es la del sándwich: para facilitar el agarre profundo hay que dar al pecho la forma ovalada de la boca del bebé. Para ello se colocan los dedos de la mano sobre el pecho, en forma de C, en el mismo sentido que los labios del niño (en paralelo a ellos) y se presiona ligeramente. Es importante dejar la areola libre para no interferir con el agarre.
- En el momento en el que el bebé abre la boca, la madre lo atrae hacia el pecho y dirige el pezón por encima de la lengua (apuntando al paladar blando).
- Se mantiene sujeto el pecho hasta que se confirma que el agarre es el idóneo.