“Papa, mamá, ¿cuánto falta?” La manida pregunta es formulada de forma repetida por los niños cuando se desplazan en coche con la familia. Como la diversión no está reñida con el aprendizaje, en este artículo se proponen seis juegos divertidos, y a la vez educativos, para disfrutar con los hijos en el vehículo. También se enumeran algunos sencillos consejos para jugar en el coche con seguridad.
Las consolas y los reproductores de vídeo son recursos con los que cuentan muchas familias para amenizar los desplazamientos en coche con sus hijos. Pero las jornadas en carretera pueden ser largas, y hasta la película o el videojuego más entretenido puede cansar a los más pequeños. Además, no se trata de que el viaje pase inadvertido para los niños y que se mantengan en todo momento inmersos en un mundo de ficción.
Los juegos para niños en el coche permiten pasar un viaje divertido
Las familias pueden sacar un buen provecho de los desplazamientos en automóvil e idear juegos divertidos y educativos que logren que los pequeños se entretengan, mientras aprenden y participan de un viaje familiar.
1. ¡A por las matrículas!
Las matrículas de los coches sirven para inventar varios juegos que harán el viaje con los niños más entretenido.
Para los que ya saben sumar, el reto consistirá en organizar una competición en la que los participantes tienen que sumar todos los números de la matrícula del vehículo que indique el director del juego. El que consiga más aciertos y sea el más rápido en averiguar el resultado será el ganador.
Se puede añadir dificultad a la actividad y proponer otras operaciones con la numeración, como restas o multiplicaciones.
2. Juego de las matrículas adaptado a los más pequeños
Para los más pequeños que aún no sepan operar con los números, se puede optar por una versión más simple, que consiste en leer de forma correcta los números de la matrícula.
Otra posibilidad para entrenar la memoria es asignar a cada número (del 0 al 9) un color. Los participantes tienen que ser capaces de leer la matrícula traducida a los colores correspondientes.
3. Un clásico: el veo, veo
El juego del «veo, veo» es uno de los más clásicos para viajar con niños. Existen distintas versiones según la edad de los pequeños.
El juego comienza cuando un jugador elige un objeto que sea visible por todos los participantes y arranca con la frase: «Veo, veo». Los demás responderán: «¿Qué ves?». Para los más mayores, la pista para adivinar el objeto será la letra por la que empieza la palabra. Para que sea más fácil para los más pequeños, se pueden utilizar los colores.
Ganará el jugador que antes adivine lo que era y se convierte en el que inicia de nuevo el juego con otro «veo, veo».
4. Educación vial con las señales
Este juego ayuda a que los más pequeños adquieran sus primeras nociones de educación vial.
El primer paso es explicar con dos breves palabras cada una de las señales de tráfico que se encuentran por el camino (curva a la derecha, prohibido adelantar, peligro de animales, etc).
Una vez que los niños las conozcan, se trata de conseguir que las recuerden cada vez que aparezcan de nuevo. Gana el jugador que acierte primero.
5. El personaje secreto en el coche
Un personaje de dibujos animados, un actor, un familiar… cualquiera sirve para pasar un rato entretenido con el juego del interrogatorio.
Uno de los jugadores debe pensar en un personaje, que debe ser conocido por todos los participantes. Los demás deben averiguar quién es, mediante la formulación de preguntas sencillas que solo se pueden responder con un «sí» o con un «no». «¿Es un hombre?, ¿Tiene más de 20 años?, ¿Tiene el pelo rubio? o ¿Es un deportista?» son algunas preguntas que se pueden hacer para resolver el enigma. El más rápido en adivinarlo se llevará el premio.
6. Seguir la ruta: un diario del viaje
Los viajes en coche son la ocasión más indicada para enseñar geografía a los pequeñosLos viajes son la ocasión más indicada para enseñar geografía a los pequeños. No se puede desperdiciar una oportunidad como esta para que aprendan los nombres de localidades, ríos, montañas y otros accidentes geográficos que forman parte del recorrido. Además, esta es una actividad que les servirá de diario del viaje cuando quieran rememorar sus vacaciones.
Para llevarla a cabo, es necesario que uno de los adultos o uno de los niños mayores disponga de una pequeña libreta y un bolígrafo. Los demás deben estar atentos a todas las señales y carteles que indiquen los lugares que se visitan (el cartel de entrada a una ciudad o pueblo y cualquier otra señalización turística de interés) y comunicarla para que conste en la libreta.
Si se desea, se puede optar por un cuaderno más grande, donde los pequeños puedan después ilustrar con dibujos las anotaciones o hacer un bonito montaje con fotografías.
En la mayoría de los juegos con niños en el coche, el conductor del vehículo no puede participar. Por eso, es aconsejable que sea otro adulto el responsable de dirigir el juego y mantener el orden en los mismos, para evitar posibles distracciones de la persona que está al volante, ya que estas son la primera causa de mortalidad en las carreteras españolas, como advierte la Dirección General de Tráfico. También es preciso aleccionar a los niños y enseñarles que hay que mantenerse tranquilos en el coche mientras juegan, para no alterar al conductor del vehículo.
Para tramos más difíciles o cuando se quiere mantener la calma en el automóvil durante un rato, se puede recurrir a los cuentos. El copiloto puede leer a los más pequeños sus historias favoritas o también se puede optar por un CD de historias narradas, que se puede adquirir antes del viaje.
Vestir a los niños con ropa cómoda, llevar un tentempié por si les entra un poco de hambre, no olvidar las bebidas y parar para descansar con relativa frecuencia son algunas de las pautas que deben seguir las familias para lograr que los pequeños tengan un viaje agradable y tranquilo.