La decoración del árbol de Navidad puede ofrecer al mismo tiempo frescura y un aspecto renovado si se sustituyen las bolas, espumillones y otros adornos típicos por productos de la naturaleza. Este artículo destaca la originalidad de decorar el árbol navideño con productos naturales y señala los pasos para hacerlo: elegir el árbol, pensar su decoración y escoger los elementos para adornar, desde pastos y hojas secas hasta velas aromáticas, pasando por flores secas, cañas y virutas de madera.
Un árbol de Navidad original, con productos naturales
El árbol de Navidad es el adorno típico de todos los hogares en las fiestas de finales de año. Y eso, a veces, puede representar un «problema» a nivel decorativo: que el árbol esté decorado igual que los demás ornamentos navideños y carezca de originalidad. Pero este pequeño inconveniente tiene solución.
La opción pasa por elegir una decoración para el árbol que escape de los tradicionales espumillones y bolas. Y para ello, una alternativa muy interesante es la de recurrir a productos naturales, que además den aire fresco a la casa y marquen un estilo particular en el árbol de Navidad. Mucho mejor aún, si el resto de la decoración de la vivienda tiene al menos algunos toques naturales, para que el arreglo del árbol combine y esté a tono.
Elegir el árbol de Navidad y pensar su decoración
Lo primero que hay que tener en cuenta será la elección del propio árbol: puede ser natural o artificial. Si se busca una decoración con productos naturales, lo más idóneo es un árbol natural, que además puede ser más bello y fragante que uno artificial. Pero esta preferencia presenta dos inconvenientes. Por un lado supone conseguir un árbol que se adecue a las condiciones de la casa, sobre todo en cuanto a su tamaño. Y por otro, con el tiempo el árbol se secará y su vigor decaerá, y puede ocurrir que en los últimos días su aspecto esté ya deteriorado; además, dejará caer pequeñas ramas y hojas secas, que ensuciarán y, si hay niños, estos podrían llevarse a la boca.
Antes de armar el árbol, conviene evaluar si los adornos naturales serán suficientes o también harán falta «clásicos»
Una vez elegido el árbol, hay que pensar en los adornos. Es aconsejable definir desde un primer momento el estilo que se ha de dar al árbol, y no improvisar sobre la marcha, ya que esto último puede tener como resultado mezclar adornos que no queden bien unos con otros. Si se han de utilizar productos naturales, hay que evaluar al comienzo la cantidad de material disponible, para determinar si serán suficientes para todo el árbol o si será necesario añadir también adornos «clásicos».
Productos naturales para adornar el árbol de Navidad
Algunos productos naturales que se pueden emplear para adornar el árbol de Navidad son los siguientes:
Pasto, hojas secas y paja. El pasto y las hojas secas quedan muy bien junto a la base del árbol, ya que dan la apariencia de que este se halla en su «hábitat natural». Por su parte, con paja (o juncos u otro tipo de vegetales similares) y un poco de cuerda, se pueden realizar adornos para el árbol, tales como estrellas, rombos u otras figuras geométricas. Con la suficiente habilidad manual, se pueden diseñar adornos más complicados.
Cañas. Los fragmentos de cañas de bambú u otras especies se pueden colocar de dos maneras. Una opción es atarlas a las ramas en posición oblícua, de tal forma que apunten hacia el extremo del árbol, lo que le da la sensación de aspecto cónico. La otra posibilidad es cortarla en segmentos, hacer a estos una perforación en un extremo y atarlos a las ramas del árbol. De este modo se obtienen unos colgantes naturales muy bonitos, que se pueden dejar de su color natural y también pintar a gusto.
Para usar las piñas como colgantes, hay que asegurarse de que las ramas del árbol puedan soportar su peso
Piñas. Las piñas también se pueden usar como colgantes, al igual que las cañas, aunque habrá que tener en cuenta si las ramas del árbol son tan fuertes como para sostenerlas. Otra alternativa es colocarla junto a la base del árbol, donde pueden conformar un conjunto muy agradable junto al pasto y las hojas secas. Y también se pueden dejar en estado natural, pintarlas de colores o barnizarlas. De la misma forma, se pueden usar frutas secas.
Flores secas. Esta es otra posibilidad que puede resultar muy atractiva para adornar el árbol. Existen varios métodos para el secado de las flores: algunos son muy rápidos (por medio de un horno microondas se tarda apenas unos minutos), pero otros requieren más tiempo (el secado al aire demanda entre tres y cuatro semanas). Por eso, si se ha de optar por un procedimiento que lleve mucho tiempo, habrá que planificarlo todo con bastante antelación. Una vez secas, las flores –de forma individual o agrupadas en pequeños ramos de tres o cuatro capullos- se atan o se cuelgan a las ramas del árbol.
Virutas de madera. Las virutas de madera también tienen, al menos, un par de usos posibles. Con ellas se pueden realizar adornos variados. Para ello, hay que confeccionar una estructura de papel, cartulina o cartón -puede ser una sola plancha o bien un cuerpo, como un cubo-, recubrirla de cola y luego echar las virutas encima, hasta garantizar que recubra toda la superficie. Así se obtienen adornos que expresan la calidez de la madera y, sin embargo, son muy ligeros y pueden colgarse sin problemas en cualquier árbol. Otro uso posible de las virutas es en la base del árbol, en lugar del pasto seco. Es compatible con las hojas secas y piñas.
Las velas aromáticas son un aditamento excelente para el árbol de Navidad. Al mismo tiempo que expanden su aroma por la casa, contagian la vitalidad de las pequeñas llamas al conjunto del árbol. Pueden estar colgadas o apoyadas alrededor del árbol.
En cualquier caso, si se opta por las velas, hay que extremar las medidas de seguridad: deben estar bien colocadas en algún recipiente que proteja la llama e impida que esta pueda alcanzar las ramas u otros adornos del árbol (incluso si este está elaborado con materiales ignífugos).
Como las velas se consumen, lo más apropiado sería -salvo que se cuente con una gran provisión de ellas- reservarlas para las ocasiones especiales (cenas de Nochebuena y Nochevieja, reuniones familiares, etc.). Se lucirán más, por supuesto, si el área donde se encuentra el árbol se deja a media luz.