El consumo de café expreso, una verdadera tendencia de los últimos años, genera que cada día sean descartadas miles de cápsulas de aluminio. Sin embargo, esas envolturas pueden tener otra vida. Por un lado, se han ideado formas para reutilizar las cápsulas volviendo a añadir café en ellas, pero también se pueden realizar múltiples manualidades, desde bisutería hasta usos variados como recipientes para velas o pequeñas plantas, relojes, bolsos o cortinas. Este artículo ofrece un decálogo de estas ideas y sus explicaciones.
Cómo reutilizar las cápsulas del café expreso
En los últimos años tomar café expreso se ha convertido en una auténtica moda. En muchos hogares, las clásicas cafeteras italianas u otros sistemas de preparación han sido relegadas por las máquinas y las monodosis en cápsulas que las estrellas de Hollywood anuncian por televisión. Estas cápsulas se presentan como descartables, sin más. Sin embargo, existen formas de reutilizarlas.
Además de para hacer bisutería, las cápsulas de café se pueden usar como pequeñas macetas o portavelas
Hay quienes recomiendan rellenarlas de café y volver a usarlas en las máquinas originales. Es un modo de reducir los costes de esta manera de preparar el café, que tiene mucho glamour, pero un precio bastante más elevado que si se compra el café normal en paquete.
En teoría, basta con recuperar una cápsula original después de su empleo, limpiarla bien, volver a llenarla de café y, luego, cerrarla con papel de aluminio, como se explica en este vídeo. Existe incluso una empresa que vende cápsulas diseñadas de forma específica para rellenar y usar multitud de veces en estas cafeteras. El sabor no será el mismo, pero tampoco estará tan mal. A partir de ahí, ya es cuestión de gustos.
Ideas para hacer manualidades con cápsulas de café
Pero las cápsulas también se pueden reutilizar para realizar muy diversas manualidades. A continuación, se enumeran algunas ideas.
1. Adorno con forma de flor. Lo más básico es realizar un pequeño adorno, con una forma parecida a la de una flor. Para ello, hay que cortar la cápsula por la mitad de su altura con un cúter. Luego, con una pinza de punta redonda, se practican pequeños dobleces y, con los dedos, se presiona para achatar cada una de las dos partes resultantes. En este vídeo se explica paso a paso este sencillo procedimiento.
2. Pendientes. Existen muchos y muy variados tipos de pendientes que se pueden crear con las cápsulas de café. En este vídeo se detalla uno muy fácil. Para achatar la cápsula, lo mejor es presionarla con una tabla de cocina u otro objeto similar. Una vez aplastada, se hacen dos orificios cerca del centro, para pasar por allí el pequeño alambre del pendiente, se pliega sobre sí misma y se pega con cola. El resultado es muy bonito.
3. Collares. El mismo vídeo que explica cómo fabricar pendientes detalla también cómo hacer collares. Se achatan las cápsulas de la misma manera, y luego se adhieren con pegamento a la cuerda del collar para dar al conjunto la forma deseada. Se pueden usar plegadas o lisas, adheridas unas a otras por la parte posterior. La diversidad de colores de las cápsulas permite lograr acabados muy bonitos. Otro modo de obtener un collar es el que se detalla en este vídeo: se recorta el aluminio de la cápsula en pequeños fragmentos y luego con ellos se confeccionan tubitos a través de los cuales se pasa un hilo. Así se pueden combinar además con abalorios y otros adornos.
4. Anillos. Este vídeo muestra cómo realizar un anillo muy simpático con tres cápsulas. Dos de ellas se aplastan, se curvan un poco con una pinza de punta redonda y después se adhieren por la parte posterior. El toque distintivo lo dará un pequeño rulo de metal, hecho con el borde superior de la tercera cápsula. Luego se une este conjunto a un anillo normal y se obtiene una original pieza de bisutería. En esta entrada del blog Manualidades Fáciles, se ofrece otra posibilidad. Hay muchísimas.
5. Pulseras. La técnica para las pulseras es parecida a las descritas hasta aquí, aunque este vídeo detalla también cómo aplastar los bordes de las cápsulas achatadas para darles forma de flor. Luego se realizan pequeños orificios para pasar el pequeño hilo que dará estructura a la pulsera.
Una cortina para una puerta de 2 metros de altura y 90 centímetros de ancho requiere unas 720 cápsulas de café
6. Un reloj. Puede haber muchas variantes para la elaboración de un reloj artesanal. El blog Les Manualitats de la Montse muestra uno construido con un disco de vinilo, al cual se incorpora un motor de reloj y con las cápsulas de café se señalan los puntos correspondientes a las doce subdivisiones horarias. Los diversos colores de las cápsulas permiten jugar con ellos y obtener distintos resultados.
7. Macetas. Aunque parezcan demasiado pequeñas para esto, las cápsulas de café también se pueden usar como macetas para plantas, como pequeños cactus o, por supuesto, artificiales. En este enlace se pueden observar algunas imágenes de lo bello que puede quedar un conjunto de estas pequeñas macetas en miniatura. Además, otras cápsulas colocadas boca abajo complementan la decoración con sus distintos colores.
8. Un bolso. Cualquier objeto o prenda que se desee se puede decorar con cápsulas de café. Como ya se ha señalado, la variedad de colores existente permite crear muy bonitas combinaciones. En este enlace se puede ver un bolso adornado con estas pequeñas piezas, y en este otro, un monedero o neceser.
9. Portavelas. Así como sirven de macetas, las cápsulas de cafe también pueden ser un recipiente idóneo para colocar velas pequeñas para una decoración cálida del salón, el dormitorio o cualquier estancia del hogar.
10. Una cortina. El proyecto estrella para elaborar con cápsulas de café es una cortina de tiras para una puerta. Su confección es muy sencilla: se trata de aplastar las cápsulas, hacerles un pequeño orificio y pasar a través de él el hilo que las sostenga y dé estructura a la cortina, como explica el blog SweetFriday. Eso sí, hacen falta muchas cápsulas. Para una puerta de 2 metros de altura y 90 centímetros de ancho, con los hilos a 5 centímetros de distancia entre sí y esa misma medida entre cada cápsula, hacen falta los envases de unas 720 monodosis de café.