Siempre es gratificante ver cómo los distintos espacios de la casa tienen el sello del trabajo propio. Esta impronta personal adquiere un valor especial en estancias como el dormitorio principal o la habitación infantil. Una forma sencilla y económica de hacerlo es entelar los cajones de las cómodas, mesitas de noche y armarios. Este práctico, económico y sencillo truco permitirá combinar las cortinas, la alfombra o la colcha con un elemento más, al que se otorgará personalidad.
Entelado de los cajones
Para empezar con la tarea de entelar, hay que fijar la atención sobre los propios cajones. Estos pueden estar rematados con listones en su parte frontal, lo que implicará que habrá que retirarlos para incorporar la tela. Si no es así, de igual modo, se recurrirá a los listones de madera para que, además de proporcionar un bonito acabado, oculten las grapas de fijación.
Una vez tomadas las medidas del frontal de los cajones, se cortarán a inglete los listones. Estos se pueden barnizar o teñir en el tono que se desee.
Mientras se secan los listones, se procederá a fijar la tela en cada uno de los cajones. Para ello, se colocará la tela encima de la cajonera con el reverso de la misma hacia arriba. Con una regla y un lápiz, se dibujará el perímetro del frontal del cajón, sin necesidad de ajustarlo al milímetro, porque el ancho del listón lo tapará.
Para cortar los trozos de tela y guata, se puede recurrir a una plantilla realizada con un cartón
Para cortar los trozos de tela y guata, también se puede recurrir a una plantilla realizada con un cartón, en el que se habrán marcado las medidas necesarias.
Una vez cortadas todas las piezas de tela, solo queda colocarlas. Para ello, se dispone la guata, y después la tela, sobre el frontal de cada cajón. Ambos tejidos se fijarán con una grapadora mecánica, de modo que las grapas queden ajustadas a los bordes para que, una vez instalados los listones de madera, queden ocultas.
Con la guata y la tela ya fijadas, y el barniz de los listones seco, se llevará a cabo el penúltimo paso: disponer los listones de madera. Estos se situarán en los bordes del frontal de la cajonera, justo encima de las grapas, y se fijarán con clavos.
Por último, solo queda poner los pomos. Para ello, se perforará la tela de la cajonera con la ayuda de un berbiquí.
Al adquirir la tela, resulta aconsejable conocer de antemano la cantidad de cajones que se recubrirán, con el fin de ajustar el presupuesto lo máximo posible y conservar un remanente, bien para muestra o para subsanar posibles errores.
Además, se adquirirá la misma cantidad de guata, ya que será el material que se colocará entre la madera y la tela para proporcionar mayor consistencia a la cajonera y evitar que la tela se rasgue con facilidad cuando roce con la madera.
