El bróker inmobiliario o intermediario en la compra de una vivienda promete ayudar a conseguir una hipoteca más barata. Pero ¿siempre que se contraten sus servicios se pagará menos? ¿Cuándo conviene contar con un bróker para adquirir una casa y cuándo no? ¿Cuánto y cómo cobran estos intermediarios inmobiliarios? En este artículo se analizan los pros y los contras de los brókeres.
¿Cuándo conviene un bróker para comprar una casa?
Servirse de un intermediario puede ser una manera de aumentar el precio de un bien o servicio. Pero los brókeres de hipotecas, esas personas que actúan como intermediarios en operaciones comerciales del ámbito inmobiliario, tienen su propio público y su propia razón de ser.
Dado el incremento en el coste de la hipoteca que supone la contratación de un bróker hipotecario, en los siguientes escenarios puede resultar interesante:
Perfiles solventes, pero sin tiempo para encontrar y negociar una buena hipoteca. Un bróker hipotecario es una suerte de personal shopper encargado de dar con el préstamo que más se ajusta a las necesidades del cliente, sin que este tenga que desplazarse de banco en banco o negociando con cada entidad.
Perfiles con necesidades de financiación especiales. No resulta extraño hallar personas que quieren comprar una vivienda, pero que precisan aumentar el techo de la financiación por encima del 80% habitual. En estas situaciones, los brókeres pueden jugar a favor de estos clientes y conseguirles una hipoteca al 100%.
En el resto de los casos, no siempre conviene contratar un intermediario para adquirir una casa. La clave es analizar los costes que implica y valorar cuál es el ahorro que promete.
¿Cuánto cobra un bróker de hipotecas?
Una de las claves para comprender cualquier negocio es conocer de dónde proceden sus ingresos. En este caso resulta esencial saber que los ingresos de los brókeres provienen de un porcentaje sobre el capital obtenido en la hipoteca hasta un máximo del 5%.
El porcentaje que aplique el bróker en particular se establecerá también en función del porcentaje de financiación sobre el precio de compraventa. Es decir, habrá tarifas del 2% para hipotecas por debajo del 80% de financiación y un 3% si es el 8% ordinario y puede llegar hasta el 5% cuando se soliciten hipotecas de financiación total.
Imagen: Inspire images
¿Qué ventajas e inconvenientes ofrece un bróker?
La principal ventaja de contratar la hipoteca a través de un bróker o intermediario financiero es la de ofrecer un servicio práctico y cómodo. Al margen de que en España este servicio no goza de las mismas garantías de transparencia que hay en los países anglosajones, donde esta práctica está mucho más extendida, es posible señalar las siguientes ventajas:
- Mejora las condiciones. El conocimiento del mercado y la red de contactos de los intermediarios les permite conseguir una hipoteca más barata que negociando directamente con la entidad. Ya sea porque pueden acceder a intereses más competitivos o porque mejoran el porcentaje de financiación, los brókeres tienen la capacidad de lograr préstamos casi imposibles, fuera del alcance del poder de negociación habitual del consumidor.
- Ahorro de tiempo. Al firmar un préstamo hipotecario es habitual recomendar tener un mínimo de tres ofertas, antes de tomar una decisión. La cantidad de trabajo que implica este proceso (búsqueda de ofertas, gestión de reuniones con entidades, entrega de la documentación correspondiente, etc.) es bastante importante, por lo que al contratar al intermediario se ahorra bastante tiempo. Además, se pueden solicitar de manera específica varias ofertas, por lo que las garantías de conseguir una mejor hipoteca son mayores.
- Pago a término de servicio. Uno de los puntos interesantes de este servicio es que no se adelanta ningún pago. El desembolso de los honorarios del bróker tiene lugar en el momento en el que conceden la hipoteca, por lo que si no se obtiene lo que se busca, no se tendrá que abonar nada.
Por otra parte, contratar un bróker implica un gasto, así que conviene sacar la calculadora y analizar cuál es el ahorro real que implica contar con un intermediario y qué pagos adicionales suponen sus servicios.