La pronunciada bajada de rentabilidad en los depósitos ha propiciado que los ahorradores busquen nuevas fórmulas con las que elevar su remuneración a través de este producto. Una alternativa que presentan los bancos se canaliza en los formatos on line. A través de este sistema, es posible mejorar los márgenes de rentabilidad, aunque solo sean unas décimas. A cambio, los depósitos on line ofrecen la comodidad de poder formalizarlos desde el ordenador de casa. En este artículo, no solo se reflejan las ventajas que presenta la aceptación de este modelo, sino algunos ejemplos para que se puedan incluir en la cartera de ahorro.
Depósitos on line, ¿qué beneficios obtendremos?
En principio, no serán ventajas materiales los que se obtendrá con la suscripción de un depósito on line. Pero la posibilidad de poderlos contratar en cualquier momento, y a todas las horas, con comodidad desde casa, e incluso durante las vacaciones, ya los hace interesantes.
Buena parte de los bancos están confeccionando depósitos on line a través de una oferta flexible y que cubre la demanda de los clientes. No hay requisitos especiales para acceder a ellos. Solo hay que detectar los modelos que se comercializan bajo esta variable.
Los depósitos a través de Internet garantizan, en cualquier caso, las aportaciones que correspondan a su vencimiento y ofrecen diferentes liquidaciones: mensual, anual o a su finalización. En cambio, adolecen de modelos alternativos, al no estar vinculados con otros activos financieros, ni tan siquiera como formatos de depósitos estructurados.
Depósitos por Internet: mejoran la remuneración
El punto crucial para su contratación es conseguir una mayor rentabilidad de los ahorros depositados. A través de los depósitos on line se lograrán los objetivos, pero sin esperar de ellos unos intereses espectaculares: estos no son posibles en la actual situación del abaratamiento del dinero por parte del órgano monetario comunitario. Pero sí que al menos se baten los márgenes. La rentabilidad puede elevarse entre medio y un punto porcentual respecto a las adquiridas por los canales tradicionales (sucursales bancarias y por teléfono).
Más fáciles de formalizar
A diferencia de los depósitos tradicionales, su suscripción es más cómoda para los clientes y, al mismo tiempo, son más flexibles, ya que en la mayoría de los modelos son los propios suscriptores quienes deciden sus plazos de permanencia y los importes.
Además, es posible formalizarlos desde cualquier aparato tecnológico, desde los más sencillos ordenadores personales al smartphone de última generación. Y los hay desde para pequeñas aportaciones hasta mayores cantidades.
¿Cuáles podemos suscribir?
Las entidades de crédito aportan muchos modelos de estas características. El único problema consiste en detectar el que mejor se amolde al perfil del cliente.
Dentro de la actual oferta destaca el depósito fácil Internet que comercializa Bankia. Está destinado a un plazo de 13 meses, ofreciendo una liquidación anual del 0,50%, que recibirán los impositores todos los meses.
Los depósitos on line de Banco Sabadell son otra alternativa para optar por estos productos bancarios. Es una inversión a corto plazo, con un plazo fijo desde 10 días a varios meses, que aporta una rentabilidad entre el 0,20% y 0,40%.
Caja España-Duero parte de una oferta similar en cuanto a sus planteamientos, a través del plazoNet impulso. En este caso se trata de una imposición para nuevos clientes, con un plazo de permanencia dirigido a 400 días, con una rentabilidad fija del 0,80%, con liquidación de intereses al vencimiento.
Otra de las propuestas proviene de BBVA, que ha desarrollado el depósito on line a 13 meses, con un tipo de interés al 0,40%.
El acceso a los depósitos on line está abierto a todos los ahorradores, sea cual fuese el respaldo de su cuenta, ya que parten de importes muy asequibles, a partir de 500 euros. No obstante, requiere de unos cumplimientos mínimos por parte de los usuarios bancarios.
Deberán suscribirse por Internet, recibiendo una clave y contraseña para acceder a su área comercial y poderlos contratar al igual que otros productos. Y, por supuesto, será imprescindible disponer de los canales adecuados para su formalización (ordenador personal, móvil, tableta u otros medios tecnológicos). Serán suficientes para realizar su contratación, casi de forma instantánea.
También deberá comprobarse que la cuenta tiene el suficiente saldo como para desarrollar el contrato. Incluso los clientes que tienen domiciliada su nómina, y si las condiciones de contratación los amparan, podrán destinar el descubierto de su cuenta -correspondiente a una nómina-, para cubrir su aportación.