Cualquier viaje conlleva una serie de gastos que repercuten en el presupuesto de las familias, en especial cuando hay que desplazarse con hijos. Alojamiento, transportes, restaurantes y actividades de ocio, entre otros, exigen un desembolso económico que resiente sus cuentas corrientes. Los viajes pueden desajustar el presupuesto para todo el año y empujar a recurrir a los ahorros. Por fortuna, hay otras soluciones más ingeniosas que sirven para gastar menos en los viajes de verano a través de un consumo más racional. ¿Por dónde empezar? Basta con aplicar algo de sentido común y mucho de imaginación para conseguir que la próxima escapada no afecte tanto al bolsillo. En este artículo se aportan siete ideas para ello.
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¿Cómo viajo más barato este verano?
Si los altos precios que suponen realizar un viaje es el principal impedimento para no disfrutarlo, a partir de ahora ya no será la principal causa para desistir del intento. Se puede viajar más barato este verano, siempre que se pongan en práctica estas siete recetas que generarán ahorros muy notables.
Buena parte de esta estrategia se basa en reducir gastos en todos los productos turísticos (alojamientos, transportes, paquetes vacacionales, etc.), a través de ofertas y promociones que abaratarán sus tarifas entre el 5% y 40%.
También, y no menos importante, hay que saber aprovechar todas las alternativas que proporciona el propio entorno del viaje: desde compartir trayecto, alojamiento y otros gastos, hasta aprender a ajustar el presupuesto e, incluso, saber utilizar de forma adecuada las tarjetas de crédito.
Siete recetas para ahorrar en los viajes
- Transportes más económicos: hay muchas ofertas en todos ellos, algunas de las cuales pueden suponer un ahorro de hasta el 50% sobre las tarifas originales. Será cuestión de analizar todas las propuestas de los operadores turísticos y seleccionar la más adecuada para el bolsillo.
- Compartirlo con los amigos: si el deseo es ahorrar al máximo, habrá que viajar con otras personas en el mismo coche (familiares, amigos, etc.). Además, ayudarán también a repartir los gastos ocasionados por el desplazamiento.
- Ceñirse al presupuesto: no hay que alejarse de lo presupuestado si no se quiere que un derroche excesivo impida realizar otros viajes en lo que resta del año. Será fundamental gastar solo lo necesario y, si es posible, evitar usar la tarjeta con tanta facilidad.
- Sin gastos en el alojamiento: se puede aprovechar la casa de algún familiar o amigo para pasar las vacaciones, evitando de esta forma que se desequilibre el presupuesto, y complementar el ahorro en el viaje con otros servicios turísticos (vuelos, hoteles y paquetes turísticos) por completo gratis para los titulares de algunas tarjetas de crédito que contemplen sorteos en estos sectores.
- Apuntarse a ofertas y promociones: los operadores turísticos desarrollan con regularidad todo tipo de propuestas para pasar las vacaciones, con una rebaja en sus precios de hasta el 50% en las sugerencias más reducidas. El único requisito es estar informados de ellas y apuntarse en los plazos habilitados.
- Si es en apartamento, mejor: este tipo de alojamiento, con importantes ofertas en sus importes, permite abaratar algunas compras (comidas, servicios domésticos, bebidas, etc.) y da mayor autonomía para quienes opten por este modelo. Asimismo, los viajeros pueden inclinarse por destinos sin excesiva demanda para que sus vacaciones les salgan más baratas. Sus costes serán mucho más competitivos, con rebajas en torno al 25%.
- No olvidarse de las tarjetas: una de las estrategias más comunes para ahorrar en el viaje consiste en aprender a usar algunas tarjetas con promociones vacacionales: a medida que el consumo es mayor, se van acumulando más puntos que después es posible canjear por billetes de avión, reservas de habitación o visitas a parques temáticos. Otros plásticos, por el contrario, inciden en proporcionar a sus titulares toda una amplia gama de descuentos en casi todos los servicios turísticos, entre el 2% y 10% sobre sus tarifas iniciales.
No solo es posible ahorrar algo de dinero en las próximas vacaciones siguiendo las pautas de comportamiento expuestas, sino también inclinándose en la demanda de financiación para los viajes, sin que se aplique interés alguno y, de esta forma, contener el nivel de endeudamiento. Pero, ¿cómo son estas financiaciones de viajes sin interés?
- Proceden de las agencias de viajes: no son los bancos sino las agencias mayoristas quienes disponen de este sistema de financiación. Lo ofrecen para quienes no pueden pagarlo en el momento y necesitan de un periodo de tiempo para devolver el importe de la operación.
- Plazos de hasta 12 meses: los vencimientos no son muy amplios, ya que es habitual que alcancen entre 6 y 12 meses como máximo, en los que se abonarán las cuotas mensuales sobre el capital adelantado y sin intereses.
- Sin gastos adicionales: tampoco incorporan comisiones ni otros gastos administrativos, constituyéndose como una de las vías de financiación más favorables para los intereses de las familias en estos momentos.