La crisis y la falta de empleo hacen aguzar el ingenio para tratar de obtener ingresos. Son numerosas las personas que deciden trabajar desde casa, una labor que requiere creatividad. Pero no todo es fácil, ya que las ocupaciones desde el hogar implican una independencia laboral y un esquema de trabajo en solitario que requiere una férrea disciplina. Las actividades que se pueden llevar a cabo son múltiples, desde la costura y los arreglos de ropa hasta la reparación de electrodomésticos o el trabajo documental con información diversa, sin olvidar todo lo relacionado con Internet y las nuevas tecnologías. Y es que las posibilidades que brinda la Red incluyen una larga lista que comprende desde el comercio y la venta de servicios, hasta la generación de contenidos o el manejo de redes. A continuación, se propone un recorrido por diez de estas posibles ocupaciones.
1. Web 2.0. Red manager o manejo de redes
Un gestor de redes sociales o «community manager» es quien se encarga de representar y gestionar la identidad de una marca o negocio en Internet.
Las tareas pueden consistir en el manejo de blogs o páginas web de la empresa o negocio (el cliente puede ser un club de barrio, un bar nocturno o un profesional de diseño), tanto en lo referido a la información institucional que quiere darse a conocer, como la generación de contenidos afines que identifiquen al proyecto.
En crisis, numerosas personas optan por mandar arreglar sus prendas en lugar de adquirir nuevos artículos
Esta es una actividad que ha tomado renovado impulso con la explosión de redes sociales como Facebook, LinkedIn o Twitter, pero que tenía su expresión anterior en el manejo de foros y la participación en las páginas webs. El «community manager» debe llevar y gestionar las comunidades/foros del negocio, con el fin de posicionar la marca y hacer más competitivo el negocio, lo que requiere una planificación pautada.
Este puesto tiene una gran demanda en empresas y negocios, pero también entre profesionales independientes, que cada vez eligen más las redes sociales para posicionarse en el mercado de trabajo.
2. Registro en páginas web u ofertas
Son sitios web que pagan por clic (PTC, pagos por clic) o por leer determinados contenidos (PTR , pagos por leer). La retribución llega a ser de céntimos de euro por página, con lo cual es el volumen lo que garantiza el éxito.
Por lo general, a medida que se acumulan los pagos, las ganancias aumentan, y algunas retribuyen con puntos canjeables por productos. En la mayoría de los casos, debe abrirse una cuenta PayPal para cobrar.
3. Publicidad en Internet
Se puede crear un portal sobre un tema que genere interés y visitas a la página, para insertar publicidad de pago y generar ingresos.
4. Atención telefónica
Puede ser a particulares (consultorios médicos o empresas de comida a domicilio), relacionada con campañas de publicidad o servicio de atención a clientes.
Se puede realizar desde la propia vivienda con cualquier teléfono de línea que la empresa conecta a su número. Con el teléfono propio también se pueden hacer encuestas telefónicas para estudios de opinión o mercado.
5. Cocina a domicilio
Cocinar para terceros es una opción viable para realizar en el barrio o en el pueblo. Se pueden elaborar una serie de menús diarios en función del público objetivo: para oficinas, si se está en una zona comercial, o para negocios, eventos o personas mayores, etc.
6. Venta de objetos
El servicio de lavado de ropa puede ser una salida laboral inmediata, pues solo se precisan lavadora y secadora de calidad y algo de promoción
Puede confeccionarse un catálogo con objetos de segunda mano que se encuentren en el trastero, pero en buen estado, o que se desee comprar para revender. Es factible realizarlo desde casa y promocionarlos en portales de subastas y de artículos usados.
Se puede vender tanto en Internet, con promoción y cobro mediante medios de pago digitales, como en comercios especializados o en tiendas de barrio.
7. Generación de contenidos
Si se cuenta con aptitudes profesionales en alguna área temática, se pueden poner contenidos a disposición de sitios especializados, o si se es diseñador gráfico o web, se puede ofrecer el desarrollo de proyectos para quien los necesite.
Puede ser maquetación de libros o revistas, diseño de folletos y carteles callejeros o edición de audio y vídeo, servicio de elaboración de documentos: transcripciones (faxes, documentos comerciales, etc.) o mecanografiado de textos. Incluso en algunas redes o blogs (como WordPress o Blogspot), se paga por artículo o post.
8. Trabajos de costura y arreglos de ropa
Se puede promocionar por las redes sociales entre los amigos en Facebook, además de generar promoción a través de la distribución de folletos informativos en el barrio y cartelería en los comercios de la zona. Es un trabajo que en época de crisis reverdece, ya que numerosas personas optan por arreglar sus prendas en lugar de adquirir nuevos artículos.
9. Lavado y planchado de ropa
Ofrecer el servicio de lavado de ropa puede ser una salida laboral inmediata, ya que tan solo se precisa una lavadora y una secadora de calidad y algo de promoción, además de organización y orden en los pedidos.
Es posible diversificar clientes o centrarse en determinado sector, según los contactos personales o las características del barrio. Se puede ofrecer en restaurantes, entre los amigos de los hijos, entre los empleados de los comercios si se está cerca de un área comercial, etc. Con el planchado sucede lo mismo y, además, se puede prestar el servicio a domicilio.
10. Manualidades
La manufactura de determinados productos, como los osos de felpa o las pantallas de veladores, requiere de algunas terminaciones que las empresas fabricantes suelen encargar a terceros. Por lo general, se pauta un pago por artículo, que va rindiendo más conforme se adquiere habilidad.