Un perro cansado es un perro feliz. «Un can joven y sano necesita entre 20 y 30 minutos diarios de ejercicio», concluye un estudio realizado por los veterinarios de la Universidad de Tufts (EE.UU.). ¿Y cuál es la forma más divertida de elevar su ritmo cardiaco mientras se evita el aburrimiento del perro? ¡Usar juguetes! En este artículo se muestra más información sobre los siete juguetes que todo can necesita: un kong, un disco volador, pelotas, mordedores, huesos de cuero, puzles y peluches para darles mucho amor. Aprenda por qué son importantes, por qué cada animal tiene sus preferencias y cómo utilizarlos con seguridad.
Juguetes para despertar la mente del perro
Jugar con el perro es importante para que realice el ejercicio que necesita. Y no solo eso. Los juguetes reducen su aburrimiento, culpable de muchos comportamientos que, por lo general, se atribuyen como negativos: desde destruir cojines o hacer pedazos la cama. «El aburrimiento del can conduce a conductas destructivas y otros problemas a los que el perro acude en un intento de lograr nuestra atención», dicen los veterinarios de la Universidad de Tufts.
Los juguetes ofrecen un estímulo mental y físico a los canes. No son un capricho, sino herramientas muy necesarias para enriquecer la vida de estos amigos de cuatro patas. Además, los perros necesitan pasar tiempo de calidad con sus queridos humanos. Y los juguetes son la excusa perfecta para lograrlo, ¡mientras que juntos lo pasan en grande!
Pero, ¿a todos los canes les gustan los mismos juguetes? No. «Igual que los niños, los perros también tienen preferencias por determinados tipos de juguetes», explica el veterinario Mark Stickney, de la Universidad de Texas (EE.UU.), quien también es autor de numerosos estudios de etología canina. ¿Cómo acertar? La clave está en probar y, una vez detectados sus gustos, hay que ajustar la selección al presupuesto y los gustos del amigo de cuatro patas.
1. Kong para perros
Los juguetes tipo kong para perros entran dentro de los llamados juguetes interactivos para canes, ya que les hacen trabajar. Estos juguetes, con forma de cacahuete y con surcos y oquedades, están preparados para poder ser rellenados con comida, que es liberada a medida que el animal muerde o golpea su kong.
«Los juguetes tipo kong son maravillosos ya que el perro tiene que trabajar pero a la vez premian su esfuerzo«, dice Stickney. Y, además, cuando son de calidad, son casi indestructibles pues están hechos con una goma resistente a los bocados.
- Aquí tiene trucos para rellenar el kong del can.
No hay que olvidarse de la cantidad de comida (en forma de bolitas, premios o comida húmeda congelada) que se incluye dentro del kong. Esta ración deberá ser reducida de la cantidad de comida diaria que se ofrece al perro para prevenir el sobrepeso.
2. Puzles caninos y otros juguetes inteligentes
Existen muchos tipos de juguetes inteligentes para canes. Los puzles son un ejemplo estupendo. Además del kong, pruebe a incluir bolas rellenas con premios y rompecabezas para su amigo. Los hay con piezas móviles y tapas que se desplazan cuando el perro las empuja con el hocico o la pata. Pero hay que elegirlo seguro.
- Más ideas sobre puzles caninos y consejos para exprimirlos al máximo.
El perro aprenderá a jugar con paciencia y sabrosas recompensas. Además, estos puzles estimularán su inteligencia. ¡Un can puede pasar horas de juego mientras que manipula los juguetes con su boca, patas y hocico!
3. Huesos de cuero para perros
Otro de los juguetes comestibles para perros son los huesos de cuero. «Estos huesos son estupendos porque permiten al can morderlos sin peligro para sus dientes«, explica Stickney. Los perros necesitan morder para ejercitar sus mandíbulas. Y si el escogido es un juguete seguro, las posibilidades de que el animal elija un mueble de la casa o las zapatillas se reducen de forma notable.
Sin embargo, también conviene tomar algunas precauciones. La primera es adquirir el hueso en un negocio fiable, para que el juguete comestible sea seguro. Pero, además, es recomendable no optar por huesos demasiado grandes que ronden por casa durante días, ya que las posibilidades de que acaben llenos de suciedad y bacterias son muy elevadas. Mejor es elegir un hueso que pueda morder y consumir durante unas horas.
4. Discos voladores para perros con ganas de correr
La mayoría de los canes disfrutan de los juegos que implican capturar un juguete. Y en esta categoría hay un juguete muy especial: el disco volador o frisbee. ¿Cuál escoger? Evite los discos duros que puedan dañar sus dientes y, por el contrario, elija un frisbee de calidad y pensado para los perros, es decir, que sea flexible y permitan a su amigo capturarlo con la boca sin dolor.
Una última precaución. El disco volador puede invitar a los perros a realizar saltos de gran altura y caer sobre sus patas traseras. Si el animal tiene problemas de huesos o puede sufrir displasia de cadera, se debe consultar antes al veterinario, porque el lanzamiento del disco será más seguro si no se le obliga a saltar tanto.
5. Pelotas para perros
Una alternativa barata o complementaria al disco volador para canes es la pelota. Una sencilla pelota de tenis hará las delicias del jugón peludo. Además, si no es demasiado grande, una bola permite incluso jugar en casa.
Para lanzar más lejos y no tener que agacharse al recoger la pelota, existen soportes rígidos para atraparla y lanzarla a mayor distancia.
6. Mordedores para perros
Una cuerda común puede resultar peligrosa para el perro, ya que existen posibilidades reales de que el can la destroce y acabe dentro de su estómago. Sin embargo, necesita morder, y los juguetes mordedores para perros hechos con cuerdas enroscadas y seguras son una gran herramienta para disfrutar del «tira y afloja» versión canina.
7. Juguetes para perros: un achuchón peludo
No todo es correr y morder. Los perros son animales cariñosos que necesitan mucho amor, por lo que un buen peluche les ayudará a sentirse reconfortados. Pero no todos los peluches son para todos los canes: mientras que un perro pequeño necesitará un juguete que pueda transportar en la boca, un animal más grande preferirá un muñeco de mayor envergadura.
- No use las bolas con un único agujero, ya que pueden hacer el efecto vacío en el interior de la boca del perro y suponer un peligro serio.
- Las piedras y los palos también son peligrosos para los canes.
- Supervise siempre el juego de su amigo peludo.
- Escoja juguetes que no quepan por completo en la boca del perro y que, por tanto, no puedan acabar en el fondo de su garganta.
- Varíe los juguetes: rótelos para exprimir las posibilidades de juego canino y que su atractivo se multiplique.
