Dulce, salado, carne, pescado o fruta para el perro. ¿Cuál es el sabor preferido del can a la hora de alimentarse? En este artículo se explican los sabores que le gustan, lo que el paladar canino rechaza, la relación entre las costumbres alimenticias y la comida favorita del perro y cuatro curiosidades sobre los gustos alimentarios del animal.
Los alimentos preferidos del perro, un paladar muy canino
El paladar canino tiene sus predilecciones que vienen determinadas por su especie, pero también por su propia personalidad y costumbres alimenticias. Cada perro tiene su propio abanico de alimentos preferidos y sus dueños son quienes mejor los conocen. No obstante, un perro no se debe alimentar solo de lo que le gusta porque puede ir en detrimento de su salud. Por ello, los dueños son quienes deben supervisar, con ayuda de su veterinario, la dieta del can.
Aunque, se pueden reservar momentos para un capricho canino culinario, siempre hay que respetar unos hábitos alimentarios correctos y saludables como base dietética del animal.
Los alimentos que más le gustan al perro
«El perro es omnívoro de orientación carnívora», comenta Aitor Llamas, veterinario. Por ello, le gusta el sabor de las proteínas animales. Los alimentos sabrosos, comoel pienso húmedo para perros también atraen al paladar canino por su untuosidad y textura.
El perro, sin embargo, suele preferir el sabor de la carne de vaca a la del pescado. Entre un bocado de ternera o de merluza, el can elegirá el de la carne roja. Aunque las preferencias particulares de cada perro también influyen sobre la elección de sus sabores preferidos, los alimentos cárnicos que al can le gustan más son los siguientes: vaca, seguida del cerdo, cordero y pollo.
Los perros suelen preferir la carne frente al pescado, y entre ellas, la de vaca, seguida del cerdo, cordero, pollo
En general, las grasas animales le resultan más atractivas al paladar canino que las vegetales. Además, pueden sentirse atraídos por alimentos o sustancias que ingieren sus dueños, como los dulces, el queso, el yogur o cualquier otro alimento elaborado para el consumo humano. El perro no precisa comer, ya que algunos de estos alimentos pueden ser tóxicos o provocarle indigestiones. Los dueños son quienes deben asumir la responsabilidad de frenar su afán devorador, que puede perjudicar su salud.
Un alimento que resulte atractivo para el olfato de un perro le cautivará para degustarlo, igual que si se tratara de un imán. Un can posee 220 millones de células olfativas, frente a los ocho millones que tiene un ser humano. Si al perro le resulta agradable el aroma que desprende el contenido de su plato de comida canina, lo comerá con gran placer.
Alimentos que rechaza el paladar canino
Los perros rechazan los sabores amargos, por eso es tan complicado darles algunos medicamentos
«Un can rechaza el sabor amargo, por ello es tan difícil conseguir que un perro tome medicamentos amargos», explica Aitor Llamas. Entre el sabor dulce y el amargo, el perro elegirá el primero. El paladar del can optará por un alimento de alta palatabilidad o untuosidad, como el pienso húmedo.
No obstante, «un alimento comercial seco de gama alta está elaborado de manera que resulta atractivo para el perro, tanto desde el punto de vista olfativo como del paladar» comenta Ignacio Arija, veterinario experto en nutrición animal y profesor de la Universidad Complutense de Madrid.
El can puede mostrar aversión por alimentos que le hayan provocado problemas de salud, como intoxicaciones o cualquier otro problema gastrointestinal en el perro. Este rechazo es más patente cuando el animal tiene el recuerdo más cercano de su experiencia desagradable y traumática con el alimento.
No obstante, para que un can rechace un alimento, incluso si está envenenado, debe esta adiestrado para ello.
Paladar canino, costumbres alimentarias
La rutina dietética del perro también influye a la hora de que coma con gusto un pienso seco. Si desde que es un cachorro ingiere este tipo de alimento, el can lo apreciará. No obstante, casi seguro que entre un plato de pienso seco y una ración de untuoso pienso húmedo se decidirá por este último.
Las excepciones también existen entre los paladares caninos. «Hay dueños que comentan que sus perros comen mucha fruta y verdura porque les encanta aunque no significa que sea lo habitual», comenta Llamas.
Factores como la raza y las costumbres alimenticias del animal en casa determinan que un chihuahua no coma igual que un mastín. Los dueños de perros pequeños tienen la tendencia a mimarles y consentirles con respecto a sus hábitos alimenticios. Los picoteos de la comida de su familia humana, queso o yogur entre otros, por parte de canes de tamaño reducido les convierten en pequeños caprichosos, capaces de probar lo que otros rechazarían.
1. La especie a la que pertenece el perro, cánido, le marca desde el punto de vista genético; su paladar tiene preferencias y le distingue como un animal omnívoro, capaz de comer en la naturaleza bayas y plantas, y de tendencia carnívora.
2. El perro tiene como ancestro no solo al lobo, sino que también tiene conexión con el coyote, lo que le convierte en un mamífero carroñero. Algunos perros tienen más desarrollada esta faceta que les impulsa a adaptarse y sentirse atraídos por cualquier tipo de alimento, incluidos los deshechos.
3. Los medicamentos para perros se recubren de sustancias que aplacan su sabor amargo, que crea rechazo en el can.
4. Combinar de manera correcta los alimentos que al perro le gustan con los que le convienen es la manera adecuada de satisfacer el paladar canino y preservar su salud.
5. Los alimentos para perros de alta gama están estudiados de manera que resulten atractivos para los canes, tanto por su textura como por su sabor y olor.