Un gesto tan sencillo como reciclar un residuo de papel o cartón supone importantes beneficios para el medio ambiente. Los consumidores tienen su protagonismo al mejorar su entorno a través del uso correcto de los contenedores azules. Las cifras de recogida y reciclaje en España han aumentado en los últimos años, pero no conviene bajar la guardia y seguir incrementando los datos. Este artículo señala por qué reciclar papel beneficia al medio ambiente y cómo se hace, cuánto papel se recicla en España y recuerda que, antes de reciclar, hay que reducir y reutilizar el papel.
Reciclar papel: por qué beneficia al medio ambiente y cómo se hace
Las ventajas ambientales de reciclar papel y cartón son muy diversas. Por cada tonelada de papel que se recoge y se recicla se ahorran dos metros cúbicos de vertedero, 140 litros de petróleo, 50.000 litros de agua y la emisión de 900 kilos de dióxido de carbono (CO2), uno de los gases de efecto invernadero causante del cambio climático.En 2014, cada español recicló 14,7 kilos de papel y cartón
Ahora bien, para lograr una correcta recuperación y reciclaje del papel y del cartón usado, el consumidor tiene que conocer qué residuos se pueden depositar en el contenedor azul y cuáles no. Los restos de periódicos, revistas, cajas o embalajes de cartón y bolsas de papel son los indicados, mientras que el papel de cocina, las servilletas de papel manchadas, los tetrabrik (van al contenedor amarillo), el papel de aluminio o sanitario, así como las etiquetas adhesivas no son válidos.El papel y el cartón usados no deben llevar restos de otros residuos, porque en tal caso contaminan el conjunto y dificultan su reciclaje, ya que tienen que separarse en las plantas de recuperación. Se estima que entre un 3% y un 5% del material arrojado a los contenedores azules no es papel ni cartón.
El actual sistema de fabricación de papel reciclado ha mejorado ostensiblemente su calidad con respecto a las primeras producciones, por lo que se puede utilizar con total normalidad para cualquier uso.
Cuánto papel se recicla en España
En 2014, cada español recicló 14,7 kilos de papel y cartón en alguno de los 195.629 contenedores azules disponibles en toda la geografía, según datos de Ecoembes, la organización que gestiona la recogida y reciclaje de los envases ligeros (contenedor amarillo) y de papel y cartón (azul).
La producción de papel y cartón recuperado en España aumentó un 4,4% en 2014, con un total de 4.438 millones de toneladas, según datos de la Asociación Española de Recuperadores de Papel y Cartón (Repacar). La tasa de recogida se situó en el 71% y la tasa de reciclaje en el 81%, “una de la mayores de Europa”, según dicha asociación. El 80% de la producción se destinó al mercado interno y el 20% restante a otros países, sobre todo a China, Países Bajos y Francia.
La crisis económica ha provocado un descenso en el consumo de papel hasta situarse a niveles de 1998, recuerda la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (Aspapel). A pesar de ello, se recogió en 2013 un 60% más de papel usado para reciclar que en 1998, según los últimos datos disponibles de esta organización.
Antes de reciclar, reducir y reutilizar el papel
El reciclaje es la tercera opción en importancia de las famosas tres erres, más si cabe en el caso de este material: se cree que un 19% del papel consumido es irrecuperable, bien porque se almacena en forma de libros, revistas, documentos, etc., o bien porque su uso hace inviable su recuperación. Asimismo, la fibra de celulosa puede ser reutilizada solo una media de seis veces, lo que impide así su posterior reciclaje.
Por ello, hay que incidir en la reducción o el ahorro en el empleo del papel y el cartón, así como en su reutilización. En primer lugar, hay que utilizar productos de papel solo cuando sea necesario y aprovecharlos al máximo. Por ejemplo, se pueden evitar los embalajes innecesarios o recargados, los folios se pueden utilizar por ambas caras y, siempre que se pueda, evitar imprimir documentos que se puedan consultar en el ordenador.
Los papeles de regalo también se pueden reutilizar y las bolsas de papel pueden servir para almacenar los restos de papel y cartón. Por su parte, se puede reducir e incluso eliminar el empleo del papel de cocina al sustituirse por trapos de tela o bayetas. Los periódicos y revistas se pueden compartir o consultar en las bibliotecas. También se puede evitar coger publicidad innecesaria. Y como una manera de concienciar a los más pequeños, se puede fabricar en casa papel reciclado.
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