El próximo lunes, 23 de febrero, se cumplen 25 años del primer trasplante de hígado efectuado en España. En 1984, los doctores Carles Margarit y Eduardo Jaurrieta realizaron en el Hospital de Bellvitge de Barcelona la primera intervención de este tipo que se practicaba en nuestro país. Desde entonces se han realizado más de 16.000.
España entró así en el reducido número de países que ponían en práctica un nuevo tipo de trasplante técnicamente mucho más complejo que el de corazón. «En aquella fecha nadie podía predecir que pocos años después, nuestro país, con una tasa de 34,2 donantes por millón de población (pmp) se situaría en la vanguardia mundial en materia de donación y trasplantes», señala el Ministerio de Sanidad en una nota.
En estos 25 años, los hospitales españoles han efectuado 16.132 trasplantes hepáticos (adultos e infantiles), según los datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). De ellos, el 1,4% es de donante vivo, modalidad que se inició en 1993 en el Hospital La Paz de Madrid, y que en los últimos años se ha conseguido incrementar. Entre 1993 y 2008 se realizaron en todo el país 222 trasplantes hepáticos de donante vivo.
En ese mismo periodo, la ONT también registró 89 donantes en asistolia (a corazón parado) y otros 187 responden a la modalidad de «split» (un hígado para dos pacientes: un adulto y un niño). Además, se produjeron un centenar de casos de trasplante hepático siguiendo la técnica denominada dominó: paciente que no puede seguir viviendo con su hígado, pese a que éste se encuentra en buen estado funcional; cuando recibe el injerto, su hígado se trasplanta a otra persona. Mención aparte merece el desarrollo del trasplante hepático infantil, que se inició en España en 1990 y hasta el momento ha beneficiado a un total de 1.009 niños. De ellos, 67 recibieron el injerto el pasado año.
Los avances quirúrgicos también han permitido efectuar en este tiempo en nuestro país 309 trasplantes combinados de hígado con otro órgano sólido, aunque hoy por hoy apenas representan el 1,9% del total. En su mayoría (244) han sido trasplantes de hígado combinado con riñón. Le siguen los multiviscerales (30), los de hígado e intestino (20) y los de hígado con páncreas (15).
A 1 de enero de 2009, 694 enfermos estaban en lista de espera para recibir un trasplante de hígado, con un promedio de demora de cuatro meses. En el caso de los niños, el tiempo de espera se reduce a tres meses.
La demora se reduce drásticamente cuando se trata de un paciente con una urgencia vital, donde oscila entre 24 y 48 horas. Entre el 5% y el 6% de todas las personas trasplantadas han recibido el injerto bajo esta fórmula, conocida como «código cero».