❌ La alergia es una enfermedad
Falso. La alergia no es una enfermedad en sí misma, sino la causa de una enfermedad o de varias. Se considera una respuesta exagerada y una reacción de hipersensibilidad del sistema inmunitario provocada por determinadas sustancias y que origina una serie de síntomas y signos de enfermedades. Por ejemplo, a una persona se le diagnostica de asma si sufre episodios de tos, pitidos en el pecho y dificultad respiratoria. Si una alergia ha causado esos síntomas, entonces se considera un asma alérgica, una enfermedad crónica que es muy frecuente entre alérgicos.
✅ Una reacción adversa a un alimento no es lo mismo que ser alérgico
Verdadero. Solo el 2 % de los adultos y entre el 3 % y el 7 % de los niños españoles padecen alergias alimentarias, según datos de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), algo que no tiene nada que ver con una intoxicación o una intolerancia.
Una intoxicación puede afectar a cualquier persona si la cantidad de un tóxico ingerido es suficiente para provocarla. Puede ser causada por un tóxico externo en un alimento en mal estado (bacterias) o un tóxico interno natural (como el de las setas venenosas).
Esto no tiene nada que ver con las reacciones no tóxicas (hipersensibilidad) que provoca un alimento en buen estado y que tan solo afecta a una proporción pequeña de personas. La hipersensibilidad puede originarse de dos formas:
- con respuesta inmunológica (alergia). Las reacciones de tipo inmunológico, como la alergia a la proteína de la leche, ocurren cuando el cuerpo se defiende frente a esos compuestos porque los identifica como algo extraño y produce anticuerpos.
- con una respuesta no inmunológica (intolerancia). Una de las reacciones no inmunológicas más conocidas es la intolerancia a la lactosa, que se produce porque existe un problema para digerir adecuadamente la lactosa en personas que tienen un déficit de la enzima lactasa.
❌ Siempre que se tienen síntomas de alergia hay que hacerse un estudio
Falso. La conjuntivitis, la rinitis, la dermatitis atópica y de contacto, la urticaria, la inflamación de la piel y el asma son síntomas de distintas alergias; además de otros digestivos como dolor, gases o diarreas, de leves a muy intensas. Pero eso no significa que todas las personas que presentan estos síntomas sean alérgicas, ya que puede haber otras causas.
Por ello, para hacerse un estudio de alergia tienen que sumarse otros factores, como el hecho de que esos síntomas se prolonguen en el tiempo o se repitan con frecuencia, y también si es evidente que existe una relación clara entre tocar, respirar o comer alguna sustancia y la aparición de los síntomas. Por otra parte, si la reacción es muy intensa, presenta alguna complicación (falta de aire, edema de glotis, palpitaciones, caída de la tensión arterial o shock) o si limitan las actividades y disminuyen la calidad de vida también es recomendable hacer un estudio.
✅ Las alergias pueden aparecer en edad adulta
Verdadero. Es más frecuente en niños y adolescentes, pero puede aparecer en cualquier época de la vida. Hay algunos casos (muy poco frecuentes) en los que la alergia se desarrolla durante la gestación y a los pocos días del nacimiento aparecen ya los síntomas de alergia en el bebé. También pueden aparecer en personas ancianas, y algunas específicas, como la alergia a medicamentos, se dan más en adultos.
❌ Todos los alérgicos deben someterse a inmunoterapia
Falso. Popularmente conocidas como las vacunas de la alergia, la inmunoterapia con alérgenos consiste en administrar al paciente pequeñas dosis de la sustancia que le provoca la alergia. De momento, es el único tratamiento que combate la causa de algunas alergias, pero no se suele utilizar en todos los pacientes. No existen vacunas para todas las alergias alimentarias o para la urticaria crónica. Se emplean sobre todo en alérgicos a sustancias ambientales (polvo, hongos, polen, epitelios de animales), al látex y a venenos de abejas y avispas. Si se puede evitar con facilidad el alérgeno que la causa (dejar de comer algo que la provoca), los síntomas son leves y se responde bien a la medicación (los fármacos alivian los síntomas), no es necesario vacunarse.
✅ Las alergias pueden desaparecer
Verdadero. En algunas personas, tras años desarrollando una reacción a una sustancia, la alergia puede llegar a desaparecer por completo; en otras puede permanecer toda la vida, aunque también pueden ir mejorando los síntomas con el paso del tiempo, siendo cada vez menos intensos. Igualmente hay casos en los que la alergia desaparece de forma espontánea y otras veces gracias al tratamiento.
La mala noticia es que una alergia también puede evolucionar a peor. En algunos casos algunas personas van adquiriendo a lo largo de los años nuevas alergias, nuevos síntomas o más intensos.
Que evolucione a peor o mejor depende de la predisposición individual, del grado de atopia (hipersensibilidad a agentes externos), de haber recibido un tratamiento más o menos efectivo o de lo constante que se haya sido.
❌ La alergia siempre se manifiesta ante el primer contacto
Falso. Hay personas que presentan la alergia ante el primer contacto con el alérgeno, pero hay otras a las que, tras años consumiendo un alimento sin ninguna reacción, un buen día se les desata la alergia. La razón está en que, a veces, en el organismo se tienen anticuerpos frente a algunos alérgenos, pero su contacto no produce síntomas. Ante las exposiciones repetidas, la persona va formando más anticuerpos frente a un determinado alérgeno, lo que le acabará provocando síntomas.
❌ Las pruebas cutáneas son las únicas que la detectan
Falso. Las alergias se detectan provocando que se manifiesten, por ello es necesario poner a la persona en contacto con los posibles alérgenos. Las pruebas cutáneas son el método más utilizado por los especialistas para ver cómo reacciona la piel del paciente. Pero algunos casos de alergias alimentarias o a medicamentos precisan que la reacción se provoque de manera oral, normalmente para poder ratificar su diagnóstico. En estos casos, se ofrece el alimento o el medicamento de una manera controlada y en el hospital para ver la reacción del paciente.
En definitiva, para desarrollar alergia hay que sumar genética y ambiente: si tenemos mucha carga genética necesitaremos poca carga ambiental, y si tenemos poca carga genética necesitaremos más carga ambiental, pero cualquier persona puede desarrollar alergias.