Un equipo de científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn) ha detectado a un grupo de individuos con obesidad mórbida que están metabólicamente sanos y que podrían ser claves para elaborar fármacos que eviten las enfermedades metabólicas, aunque aumente el tejido adiposo. Este hallazgo ocupó la portada de la revista especializada «Biochemical Journal» durante el pasado mes de julio.
En los últimos años, se ha aceptado de manera amplia entre la comunidad científica que la obesidad se caracteriza por el aumento e inflamación crónica del tejido adiposo, algo que predispone a los individuos afectados a padecer diabetes tipo 2 y otros trastornos asociados con el síndrome metabólico. Sin embargo, no se había descubierto que un subgrupo de individuos con sobrepeso extremo parece estar protegido contra las patologías relacionadas con este síndrome y cuyo tejido adiposo no muestra señales de inflamación.
Es la conclusión del estudio realizado por el grupo de Investigación y Desarrollo en Obesidad Humana del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, que lidera el doctor Francisco J. Tinahones, en el que han participado 24 sujetos con obesidad mórbida (12 hombres y 12 mujeres), con distinto grado de resistencia a la insulina, y un grupo de control de 12 pacientes no obesos (seis hombres y seis mujeres) sin alteraciones en su nivel de lípidos ni en su metabolismo de glucosa.
Se ha constatado que «cerca del 20% de los sujetos con obesidad mórbida que han participado en este estudio presentan un tejido adiposo que se comporta de manera similar al de los sujetos delgados, lo que elimina la creencia de que a más grasas más problemas», explicó Tinahones. «Además, un alto porcentaje de ellos no tiene ninguna enfermedad», apuntó el científico, para quien esto se puede deber a que su tejido adiposo está mejor preparado para hacer frente al exceso de calorías. El doctor señaló la necesidad de abrir nuevas líneas de investigación que permitan aclarar el mecanismo exacto que protege a estas personas contra los trastornos derivados del sobrepeso.
Este hallazgo del CIBERobn refuerza la idea de que esta inflamación puede ser una de las causas de alteraciones metabólicas y resistencia a la insulina en los individuos con sobrepeso, aunque no lo prueba. Serán necesarios otros estudios para este fin, tales como identificar los factores etiopatogénicos que determinan si el tejido adiposo de un individuo obeso mórbido se inflama y por qué. El objetivo se centra ahora en descubrir qué genes tienen activos los obesos mórbidos sanos que los protegen contra las patologías para buscar los denominados blancos o dianas terapéuticas.