Facultativos españoles han convalidado el llamado «test de los siete minutos», una prueba que permite la detección precoz del Alzheimer. Para ello, expertos de las secciones de Neurología de los hospitales Severo Ochoa de Madrid, Virgen del Camino de Navarra y Virgen Macarena de Sevilla han sometido a unas 700 personas al test, que está previsto que pueda ser aplicado por los médicos de atención primaria.
La prueba, utilizada de forma sistemática en Estados Unidos, consiste en una serie de preguntas y dibujos que permiten detectar los síntomas más tempranos de la enfermedad. En este sentido, la prueba explora en el paciente la orientación temporal, la memoria y la fluidez verbal, aquellos procesos cognitivos que se deterioran al inicio de la afección.
«El diagnóstico permite comprender los síntomas de la enfermedad, de manera que los comportamientos erróneos del enfermo dejen de ser considerados una falta imputable a la persona, y en su lugar, se expliquen bajo los efectos de la demencia», explicó el psicólogo de la Asociación Alzheimer Santa Elena, Manuel Ruiz Adame. La importancia de la detección precoz radica en poder ayudar a estas personas a través del tratamiento de la enfermedad en sus primeros estadios, añadió.