La vuelta a la normalidad, o como la llaman los expertos, la “nueva” normalidad, trae consigo una serie de retos y oportunidades de cara al futuro. Y no solo en lo que a Atención Primaria y telemedicina se refiere para hacer frente a la pandemia por covid-19, sino también a la atención de los pacientes crónicos. La atención sanitaria que se dispensa en los centros de salud es uno de los pilares fundamentales en el seguimiento de los pacientes con patologías crónicas, como es el caso de la diabetes. Por eso, como explicamos a continuación, su papel ha de tenerse en cuenta y reforzarse dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Atención Primaria, clave en la ‘nueva’ normalidad
La vuelta a la normalidad tras el estado de alarma trae consigo una serie de retos para el Sistema Nacional de Salud (SNS), en general, y para la Atención Primaria, en particular. Y es que en los próximos meses los centros de salud y los médicos de familia tendrán un mayor importancia en cuanto a la detección precoz de los casos de covid-19, pudiendo así limitar al máximo la expansión del contagio de la enfermedad.
Por eso, desde Atención Primaria se han solicitado ya mayores recursos humanos y económicos para afrontar con garantías el nuevo escenario sanitario que se plantea. Para ello, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) ha elaborado un decálogo de recomendaciones, peticiones y necesidades, donde se recogen los pilares de cómo poder dar una respuesta adecuada a la demanda asistencial que se prevé se produzca en los próximos meses, y que así no se colapse el sistema.
Durante el periodo de confinamiento, y como medida preventiva de contagio, Atención Primaria ha atendido en gran medida a los pacientes a través de llamadas telefónicas y de manera telemática. De hecho, muchos no han acudido a los centros de salud, por lo que la iniciativa se ha revelado como una alternativa viable para evitar una exposición innecesaria a la covid-19. Sin embargo, muchos otros pacientes han dejado de ir cuando sí era necesaria una consulta presencial, lo cual ha generado, en algunos casos, un descontrol de la patología.
Atención Primaria, primordial para personas con diabetes
Para las personas con diabetes, la atención continuada de su equipo de Atención Primaria es primordial para evitar complicaciones y recibir la educación diabetológica que necesitan para gestionar su día a día sin obstáculos. Según diversos estudios, los pacientes que reciben una formación en diabetes de calidad e impartida por profesionales sanitarios mejoran hasta en un 40 % la adherencia al tratamiento. Por ello, desde la Federación Española de Diabetes (FEDE) hemos puesto en marcha la campaña ‘¡Educación Diabetológica YA! Nuestro derecho, nuestra salud’, con el objetivo de conseguir una formación individualizada y ajustada a cada paciente.
También, una vez pasada la fase más crítica de la crisis sanitaria, desde las federaciones y asociaciones de pacientes se está lanzando un mensaje de tranquilidad a las personas con diabetes, y otras patologías consideradas de riesgo ante un posible contagio por covid-19, a que no tengan miedo de acudir a los centros de salud u hospitales si fuera necesario. Y es que no hacerlo podría derivar en complicaciones más graves de no atenderse a tiempo y por un profesional sanitario.
Durante estos últimos meses, muchos ciudadanos han aplazado sus visitas a Atención Primaria, lo cual ha podido provocar desajustes del tratamiento de las personas ya diagnosticadas con diabetes, así como de los nuevos debuts, algunos de los cuales han tenido que ser derivados a urgencias por la gravedad de no haber acudido antes al centro de salud o al hospital.
Además, los expertos muestran una gran preocupación por los retrasos en el calendario de vacunación habitual de los más pequeños, a pesar de que el Ministerio de Sanidad ha mantenido abiertos todos los programas de inmunización disponibles para la población.
Por eso, desde las asociaciones recordamos a las personas con diabetes que no demoren su visita a los centros de salud o a los hospitales, ya que de esta forma se evitan riesgos de sufrir complicaciones que puedan derivar, en los casos más graves, en hospitalizaciones.
La telemedicina, ¿el futuro?
Por otra parte, la pandemia por covid-19 ha generado un punto de inflexión muy positivo, ya que está contribuyendo a consolidar la vertiente más tecnológica de nuestro SNS. En este sentido, y manteniendo siempre la consulta presencial en los casos que sean necesarios, la implementación de la telemedicina a través de plataformas online se contempla cada vez más como una alternativa a las consultas rutinarias, teniendo la capacidad así de reducir visitas y traslados a los centros de salud y facilitando el seguimiento de los pacientes con patologías crónicas, como es el caso de las personas con diabetes.
Los beneficios de la telemedicina para las personas con diabetes son múltiples. Precisamente, gracias al buen control y gestión de la diabetes que se consigue a través de la educación diabetológica, el paciente con esta patología se puede ver beneficiado a la hora de hacer un seguimiento online de los datos que le reportan sus dispositivos de monitorización continua de la glucosa, por ejemplo.
No obstante, hay que ser realista y no olvidar que sigue existiendo una brecha digital entre generaciones, y este será el principal obstáculo a sortear en los próximos años. Si bien es cierto que muchas personas mayores durante esta pandemia han aprendido a usar los dispositivos móviles para ponerse en contacto con su médico de cabecera, aunque solo fuera a través de una llamada telefónica de seguimiento.
La revolución tecnológica llegó hace muchos años para mejorar la calidad de vida de las personas con patologías crónicas y continúa siendo una gran herramienta por explotar. La relación médico-paciente de forma virtual no es algo nuevo, pero es ahora cuando su demanda por necesidad ha aumentado. La adaptación y la reinvención son prioritarias para el Sistema Nacional de Salud (SNS) después de que el mundo, tal y como lo conocíamos antes de la pandemia, haya mudado por completo de piel, convirtiéndose la telemedicina en una aliada dentro del nuevo paradigma.