Qué es y cómo se trata el cáncer de pulmón

El pulmón es uno de los órganos principales de nuestro cuerpo. El encargado de la captación del aire y de ingresar oxígeno, que constituye el motor para que nuestro organismo funcione correctamente.

El pulmón se encuentra dentro de la caja torácica (la cual hace de protección) y recubierto por dos membranas muy finas, las pleuras. Está dividido en dos partes: el pulmón derecho, que a su vez está dividido en tres lóbulos; y el pulmón izquierdo, que tiene dos lóbulos. Por ese motivo el derecho siempre alberga más volumen que el izquierdo, si pensamos en cantidad de aire que entra en cada uno.

El intercambio de los gases, que es la mayor finalidad de este órgano, no se produce en todos los lados del pulmón. En unas zonas solo lo conduce y en otras, se da ese intercambio; es el sector que llamamos propiamente la zona respiratoria. Esta área estará formada por los últimos bronquiolos, los sacos alveolares y los alveolos.

Nuestro organismo está formado por millones de células que se agrupan formando tejidos y órganos. Cuando estas células se dañan, envejecen o mueren, nuestro cuerpo inicia un proceso de división para sustituirlas y asegurar así la integridad y el correcto funcionamiento de los órganos.

Cuando una persona tiene cáncer, lo que sufre es una enfermedad genética, en la que se desencadenan una serie de procesos hasta llegar a transformar las células normales en células tumorales, que se dividen de forma incontrolada, de manera constante y sin límite (lo que se denomina proliferación).

En el caso concreto del cáncer de pulmón, esto sucede en las células que recubren el epitelio de nuestro sistema respiratorio, desde la tráquea hasta las partes más distales (los alveolos).

El cáncer de pulmón sigue siendo uno de los más diagnosticados tanto a nivel mundial como en España. De hecho, se calcula que en 2035 podría haber 40.000 personas afectadas, cuando en 2019 hubo 29.503 casos diagnosticados.

En cuanto al principal causante, es el tabaquismo tanto activo como pasivo. Pero tienen mayor riesgo las personas que han estado expuestas con mayor tiempo y cantidad. De ahí la importancia de todas las campañas de sensibilización y concienciación, sobre todo ante la población más joven.

Principalmente existen dos tipos de cáncer de pulmón, según el tamaño de la célula afectada:

➡️  De células no pequeñas, el cual supone un 85 % del total, se divide en tres subtipos: 

• Carcinoma escamoso o epidermoide 
• Adenocarcinoma  
• Carcinoma de células grandes 

➡️  Microcítico (de células pequeñas)

Los síntomas del cáncer de pulmón son muy imprecisos o inespecíficos e incluso se pueden parecer a los de otras patologías. Por eso hay veces que pasa desapercibido. Además, las señales de este cáncer suelen dar la cara cuando la enfermedad está bastante avanzada.

• Tos persistente: suele ser irritativa, rebelde, repetitiva y no produce moco.
• Dolor constante en el pecho, al respirar profundamente o toser.
• Secreciones con sangre o de color metal oxidado.
• Sensación de falta de aire, inicialmente con el esfuerzo grande hasta aparecer con pequeños esfuerzos.
• Infecciones pulmonares frecuentes que no ceden tras haber completado el tratamiento antibiótico.
• Ruidos al respirar, como sibilancias.
• Cambios en la tonalidad de la voz o ronquera.
• Fatiga.
• Pérdida de peso.
• Dolor en los huesos.

Ninguno de estos síntomas son exclusivos ni definitivos, ya que también pueden aparecer con otro tipo de dolencias. Pero si se sospecha, lo mejor es acudir al médico para un mejor asesoramiento.

• Enfermedades que no dan síntomas

El pronóstico del cáncer de pulmón dependerá de:

• la precocidad del diagnóstico (cuanto antes se detecte mayores opciones hay).
• el tipo de cáncer de pulmón que sea, su tamaño y localización.
• la presencia o no de afectaciones a los ganglios.
• el estado general del paciente, etc.

Es necesaria la realización de varias pruebas, para determinar a qué cáncer de pulmón nos enfrentamos y así poder tomar la mejor elección terapéutica. Algunas de estas pruebas son:

• Entrevista o anamnesis y un examen físico 
• Radiografía de tórax
• Analítica completa
• TAC o escáner torácico y abdominal 
• TAC o resonancia magnética cerebral
• Tomografía por emisión de positrones
• Biopsia del tumor o de un ganglio
• Broncoscopia y/o mediastinoscopia
• Punción transtorácica
• Toracentesis
• Gammagrafía ósea
• Espirometría

Una vez realizadas todas las pruebas, obtendremos la información suficiente para ver ante qué cáncer de pulmón estamos y en qué estadio está. El diagnóstico es fundamental, ya que tiene un papel importante en el pronóstico y la decisión terapéutica que hay que tomar.

Hay distintas modalidades terapéuticas:

Se suele utilizar en pacientes con la afectación localizada, y no hay, en cambio, en los grandes vasos o algún otro órgano. Según la parte que haya que quitar del pulmón, se denominará de una forma u otra: segmentectomía, lobectomía y neumonectomía.

Tras la intervención, el proceso de recuperación es molesto y largo, además de que esto puede ocasionar pérdida parcial de la capacidad respiratoria.

La radioterapia se aplica sola o conjuntamente con la cirugía. Consiste en la utilización de rayos X de alta energía para eliminar las células cancerígenas.

Supone el uso de fármacos muy potentes por vía oral o intravenosa, para destruir o frenar el crecimiento de las células cancerígenas.

Antes de aplicar este tipo de tratamiento, es muy importante valorar que los niveles de glóbulos rojos y leucocitos son normales y que los riñones funcionen correctamente. 

Este tratamiento en investigación está dando resultados muy esperanzadores. Emplea fármacos que se usan para bloquear y destruir las células afectadas.

A estos tratamientos hay que añadir otros complementarios que ayudarán a mejorar la calidad de vida de los pacientes, como los cuidados paliativos, la rehabilitación respiratoria, soporte psicológico, soporte nutricional, etc.

🔴 Ante la presencia de cualquiera de los factores de riesgo comentados y la existencia de alguno de los síntomas, es recomendable acudir al médico para realizar las pruebas pertinentes.

Si aún así tiene cualquier duda le invitamos a que contacte con nosotros escribiéndonos a cuentanos@lovexair.com, y uno de nuestros fisioterapeutas respiratorios (Coaches HappyAir) le contestarán lo antes posible.