Según ha informado la Sociedad de Patología Digestiva (SEPD), el cáncer colorrectal es la segunda causa de mortalidad por cáncer en España. Este tipo de tumor esta creciendo de forma «alarmante», según las autoridades, y constituye el 15% de las neoplasias malignas.
Pedro Menchén, miembro de la SEPD, ha señalado que es necesario generalizar en la atención primaria la realización del test de sangre oculta en heces (colonoscopia) a partir de los 50 años con el fin de diagnosticar o descartar una lesión maligna o benigna que pueda convertirse en neoplásica con el paso del tiempo.
Las principales señales para que los pacientes acudan al médico son los cambios en el ritmo intestinal o la sangre en las heces. Asimismo, los pacientes con antecedentes familiares de pólipos colorrectales o de cáncer colorrectal tienen mayor probabilidad de desarrollar cáncer y deben someterse a un estudio.
Según ha señalado Menchén, «la buena noticia en el cáncer colorrectal es que es muy fácil evitarlo haciendo una prevención adecuada; cuando se detectan pólipos en la exploración, que pueden ser lesiones pretumorales, éstos se pueden resecar, sin necesidad de cirugía, eliminando la posibilidad de que se conviertan en cáncer con el paso de los años». Respecto a la influencia de la alimentación, Menchén considera que es beneficiosa una alimentación equilibrada, rica en fibras, vitaminas y minerales y la exclusión del tabaco.
La mayoría de los casos de cáncer colorrectal se desarrollan a partir de lesiones benignas en las paredes del colon o del recto y se pueden extraer cuando se realizan exploraciones.