La incidencia del cáncer en el entorno de las centrales nucleares españolas será objeto de un estudio epidemiológico, según un acuerdo alcanzado entre el Instituto de Salud Carlos III, dependiente del Ministerio de Sanidad, y el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). Según informaron ayer fuentes del sector nuclear, la investigación se realizará en virtud de un convenio de colaboración que será firmado en breve por ambos organismos.
Mediante este acuerdo, el Carlos III y el CSN dan cumplimiento a un mandato parlamentario aprobado por el Congreso en noviembre de 2005 a propuesta de PSOE e Izquierda Verde para llevar a cabo una investigación cuyo principal objetivo será determinar si existe una especial incidencia del cáncer en las poblaciones cercanas a las centrales nucleares.
La investigación se realizará en alrededor de 325 municipios de toda España, siendo unos 80 de ellos los que realmente están a menos de 10 kilómetros de una central nuclear, según revelaron las mismas fuentes. A pesar de estar contemplado inicialmente, no se incluirá al final en el estudio el análisis de la susceptibilidad genética de la población.
Con el fin de llevar a cabo este trabajo, cuyos primeros resultados se conocerán previsiblemente antes de fin de año, el CSN aportará recursos económicos y técnicos, así como las muestras de sus bases de datos sobre mediciones radiológicas ambientales de aguas, tierra o vientos. Y es que las centrales nucleares españolas disponen de datos sobre miles de muestras analizadas por diferentes laboratorios que las recogen con el fin de corregir cualquier situación anómala que pueda darse.
Uno de los motivos que llevó al Congreso a impulsar esta investigación fue la necesidad de actualizar los datos de estudios anteriores, como el realizado por el Centro Nacional de Epidemiología en 1996, que indicaban la posibilidad de un aumento de riesgo de algunos tumores en estas zonas.