La enfermedad del lupus eritematoso sistemico (LES) afecta en España a unas 40.000 personas, en su mayoría mujeres en edad fértil de entre 17 y 35 años, según los datos la Sociedad Española de Reumatología. Se trata de una enfermedad autoinmune crónica que provoca que el mecanismo de defensa del organismo comience a atacarse a sí mismo, lo que crea un exceso de anticuerpos en el torrente sanguíneo y causa inflamación y daños en las articulaciones, los músculos y otros órganos.
Este hecho pone en riesgo la vida del paciente debido a que puede afectar a cualquier órgano del cuerpo como la piel, el corazón, los pulmones, los riñones o el cerebro. Sin embargo, su causa es desconocida, aunque se sabe que existen factores genéticos, ambientales y metabólicos que pueden influir en esta enfermedad. En este sentido, los profesionales insisten en la necesidad de un abordaje precoz para que los afectados respondan de forma positiva a los tratamientos.
Entre las manifestaciones clínicas más frecuentes se pueden destacar las del aparato locomotor -dolor e inflamación de las articulaciones-, el cansancio, la fiebre, la pérdida de apetito y de peso, la disminución del número de glóbulos blancos, rojos y plaquetas, manchas en el dorso de la nariz y en las mejillas, e incluso trastornos neurológicos como estados de confusión, cefaleas o convulsiones. Por ello y para concienciar sobre esta enfermedad y aumentar el conocimiento de los síntomas con el fin de mejorar el diagnóstico, este jueves, día 10 de mayo, se celebra el Día Mundial del Lupus.
El año pasado se puso en marcha en España el primer Registro de Pacientes con Lupus Eritematoso Sistémico de la Sociedad Española de Reumatología (RELESSER), con el objetivo de obtener datos y poder desarrollar diferentes estudios que permitan perfeccionar el conocimiento sobre la enfermedad y mejorar la atención de los pacientes. Hasta la fecha, se han incluido 1.562 pacientes de 40 hospitales de todo el país y se espera poder llegar pronto hasta los 3.000 afectados.