Cada vez que salimos de casa, no debemos olvidarnos de la mascarilla ni del gel hidroalcohólico, sobre todo, si no tenemos posibilidad de lavarnos las manos con agua y jabón. Pero ¿y los guantes? ¿Son necesarios? Las autoridades y los profesionales de la salud sostienen que, para protegernos del coronavirus, no hace falta usarlos, aunque sí que son convenientes en ciertos espacios, y hasta deberían ser obligatorios. En las siguientes líneas te contamos dónde debes utilizarlos en tus salidas y por qué.
Como ya sabemos, el SARS-CoV-2 se transmite a través de las secreciones de personas infectadas. Principalmente por contacto directo con gotas respiratorias de más de 5 micras, que se expulsan mediante la tos, estornudos o exhalaciones y que son capaces de transmitirse a distancias de hasta dos metros. Pero también puede transmitirse por las manos u objetos que se hayan contaminado con estas secreciones y que, después, nos llevemos a la boca, nariz u ojos.
Según la información más reciente del Ministerio de Sanidad, en un estudio se confirma la permanencia del coronavirus en superficies de cobre, cartón, acero inoxidable y plástico es de 4, 24, 48 y 72 horas, respectivamente a 21-23 ºC y con 40 % de humedad relativa, mientras que en otra investigación, a 22 ºC y 60 % de humedad, se dejó de detectar el virus después de tres horas sobre superficie de papel (de imprimir o pañuelo de papel), tras uno o dos días sobre madera, ropa o vidrio y más de cuatro días sobre acero inoxidable, plástico, billetes de dinero y mascarillas quirúrgicas.
De ahí que también muchas personas vean necesario el uso de guantes, además del de mascarillas, para evitar los contagios. Sin embargo, no es una recomendación extensible a la población, fuera de ámbitos muy puntuales, como explican distintos expertos.
Usar guantes: dónde sí hacerlo
Los guantes desechables se deben utilizar “exclusivamente cuando hay una indicación expresa y retirarlos inmediatamente tras finalizar la necesidad”, puntualizan desde la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH). En el mismo sentido habla la farmacéutica y experta en seguridad alimentaria Gemma del Caño: “Los guantes están reservados exclusivamente para acciones puntuales”.
¿En algún caso más? “En ningún caso más. Si usamos los guantes como si fueran nuestras manos, estarán sucios como están nuestras manos, o casi peor, porque nos dan una sensación de limpieza y seguridad que no existe en realidad”, señala la experta. “En ningún caso podemos tocarnos la cara con los guantes, usar el móvil con los guantes… hay que limitarlos a la acción puntual sin hacer nada más”, remarca.
Una de las indicaciones expresas debería ser en el transporte público. “En el metro debemos ponerlos a la entrada y quitarlos a la salida”, aconseja Del Caño. Y otra, en los comercios de autoservicio como los supermercados, donde al 70 % de los ciudadanos le preocupa contagiarse, según una encuesta reciente realizada por la aplicación de análisis de productos de alimentación El CoCo. Pero ¿sería necesario estar con guantes desde la entrada al comercio?
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Cuándo usar los guantes en el supermercado
La ‘Guía de buenas prácticas para los establecimientos del sector comercial’ editada desde la Secretaría de Estado de Comercio recoge que “se recomendará el uso de guantes desechables de un solo uso en las zonas de autoservicio, que deberán estar siempre disponibles”, mientras que en otro punto señala que en el caso de frutas y verduras en autoservicio deberán seguirse recomendaciones respecto al lavado y tratamiento del producto y el uso de guantes desechables.
Según el Ministerio de Sanidad, es conveniente utilizar guantes de usar y tirar para elegir frutas y verduras como se venía haciendo hasta ahora. Del Caño también lo considera necesario “cuando vamos a escoger un producto descubierto como fruta y verdura, pero deben ponerse y quitarse después de la acción”.
En cambio, la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene va más allá y, además de recomendar la no utilización de guantes en la población general durante su actividad diaria habitual y de que en establecimientos no sanitarios quede limitado a actividades muy concretas en su ámbito (como la selección de frutas y verduras), pide “el cese del ofrecimiento u obligación del uso de guantes a la entrada de los establecimientos y que se sustituya por higiene de manos a la entrada y salida de los mismos”. Y en estos casos, como es complicada una higiene de manos con agua y jabón, sería con productos de base alcohólica, como los que recoge la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) en esta lista (actualizada a 6 de mayo de 2020).
La experta en seguridad alimentaria también subraya que “en la entrada del súper te pueden dar unos guantes o gel hidroalcohólico, pero luego habría que utilizar unos guantes específicos para la fruta”. Y no considera que debería ser recomendación, sino una obligación.
Y eso sí, los médicos sostienen que cuando se usan los guantes para elegir la fruta y las verduras, tanto antes como después de utilizarlos debe hacerse una buena higiene de manos.
Otro dato interesante y que puede arrojar luz. El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos no los recomienda en los establecimientos de farmacia comunitaria, como aparece en sus directrices sobre el procedimiento de actuación ante el proceso de desescalada. Tan solo señala que se ponga “en la entrada, a disposición de los usuarios, dispensadores de geles hidroalcohólicos o desinfectantes con actividad viricida y, si en el caso de que el cliente tenga que coger productos expuestos a su alcance, deberá limpiarse las manos con gel antes de cogerlos”.
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Por qué no usar guantes en la calle
Cuando salimos a la calle, la limpieza adecuada y frecuente de manos es más eficaz que el empleo de guantes. ¿Por qué? El Ministerio de Sanidad ya lo indicaba en marzo, al principio de la pandemia:
- utilizar guantes durante mucho tiempo hace que se ensucien y puedan contaminarse.
- te puedes infectar si te tocas la cara con unos guantes que estén contaminados.
- quitarse los guantes sin contaminarse las manos no es sencillo, requiere de una técnica específica.
Además, un uso incorrecto —alerta— “puede generar una sensación de falsa protección y poner en mayor riesgo de infección a quien los lleva, contribuyendo así a la transmisión”. En este aspecto, el Ministerio no ha cambiado de parecer y ha insistido en ello en diversas ocasiones, como hace apenas un mes en Twitter.
Por otro lado, la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH) insiste también en que utilizar guantes no es una medida recomendada por autoridades oficiales como la Organización Mundial de la Salud para la población general. “Lavarse las manos con frecuencia proporciona más protección ?frente al contagio de la COVID-19 que usar guantes de goma. El hecho ?de llevarlos puestos no impide el contagio, ya que si uno se toca la cara ?mientras los lleva, la contaminación pasa del guante a la cara y puede ?causar la infección?”, dice la OMS.
Como explica la SEMPSPH, llevar guantes “no aporta una protección adicional respecto a la higiene de manos e, incluso, puede incrementar las posibilidades de transmisión de la enfermedad entre personas o a partir de superficies potencialmente contaminadas”. Y da dos razones: no son necesarios y no se usan correctamente.
Y es que el SARS-CoV-2 no puede penetrar en la piel sana y, por tanto, no es posible contagiarse de la COVID-19 por ella, así que no es necesario tener una capa adicional de protección con el uso de guantes. Esto explica por qué los dermatólogos sí lo recomiendan en casos de dermatitis y psoriasis en las manos.
Los especialistas en medicina preventiva insisten en que los guantes pueden contaminarse igual que la piel y, como argumentaba el Ministerio, no es fácil quitárselos sin contaminarse las manos, requiere de una técnica específica. “Quitarse los guantes tocando la parte central con la mano desnuda es una mala práctica”, reconoce la farmacéutica y experta en seguridad alimentaria Gemma del Caño. ¿Cómo deberíamos retirar los guantes? “El primero pinzando desde el centro y tirarlo si es posible y, si no, recogiéndolo con la otra mano. Y después, con nuestra mano desnuda, debemos introducir el dedo por la zona de la muñeca para no tocar el exterior del guante y tirar”, describe.
Los guantes de polietileno son los que encontrarás en la gran mayoría de los supermercados y puestos de autoservicio, como las fruterías. No se adapta a la mano, pero consigue una protección higiénica que garantiza la seguridad alimentaria en tareas sencillas y rápidas.
Los de látex natural no son recomendables, pues da muchos problemas alérgicos. Y los de vinilo, como explican los expertos del Grupo Español de Investigación en Dermatitis de Contacto y Alergia Cutánea (GEIDAC) de la Academia Española de Dermatología y Venereología en este documento, son permeables. Por lo que los de nitrilo sin polvo serían otra opción para evitar problemas en la piel.