El Instituto de la Vid y del Vino de Castilla-La Mancha (IVICAM) está llevando a cabo un proyecto para estudiar las propiedades anticancerígenas de dos compuestos de la uva y el vino, según ha informado el Gobierno de esa comunidad.
El consumo habitual de cereales, legumbres, frutas y verduras frescas, aceite de oliva virgen y vino en cantidades moderadas es considerado como uno de los principales factores asociados a la menor incidencia de enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer, en concreto, el de colon, en los países mediterráneos en comparación con los del norte de Europa.
Actualmente, se cree que estos efectos quimiopreventivos están relacionados con los compuestos fenólicos presentes en dichos alimentos. Por ejemplo, los polifenoles del vino tinto y el té negro han mostrado su capacidad para inhibir el crecimiento de las células del cáncer de colon.
Los polifenoles presentes en la uva y el vino incluyen una gran variedad de compuestos pertenecientes a diferentes familias, como los flavonoles laricitrina y siringetina, los cuales son relativamente abundantes en la uva y el vino, representando en torno al 15% de los flavonoles totales.
El proyecto que está desarrollando el investigador del IVICAM Sergio Gómez pretende estudiar los potenciales efectos antiproliferativos de estos dos compuestos en las células tumorales del cáncer de colon. Se espera que los resultados obtenidos contribuyan a una mejor evaluación de la importancia de los compuestos fenólicos de la uva y el vino en la mejora de la salud humana.