El pasado 31 de marzo se celebró el Día de la Prevención del Cáncer de Colon en España, con el objetivo de concienciar sobre las medidas de prevención y promover los programas de cribado en personas con riesgo de sufrirlo, ya que, si detecta de manera prematura, las tasas de curación superan el 90%. En este artículo se explica la eficacia de la colonoscopia como medida de detección y prevención del cáncer colorrectal y qué grupos de la población tienen mayor riesgo de desarrollarlo. También se apuntan las señales de alarma que obligan a una consulta médica.
El cáncer colorrectal es una enfermedad muy frecuente. En España, cada año se diagnostican más de 32.200 casos de cáncer de colon y, en Europa, alrededor de 400.000. Supone entre el 10% y el 15% de todos los cánceres y, según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en los países occidentales ocupa el segundo lugar detrás del cáncer de pulmón en el hombre y del cáncer de mama en la mujer. También es uno de los que más fallecimientos provocan: en nuestro país, más de 14.500 muertes cada año. Sin embargo, si se detectan a tiempo, es el tumor con mayores probabilidades de curación, cerca del 90%.
La colonoscopia: una herramienta de prevención
El cáncer de colon tiene una tasa de curación superior al 90%, si se detecta de forma precozPara concienciar de la importancia de la detección precoz, a lo largo del mes de marzo, Mes Europeo del Cáncer de Colon, se han llevado a cabo distintos eventos sociales y científicos. Estas actividades tuvieron su culmen el pasado 31 de marzo, con la celebración del Día de la Prevención del Cáncer de Colon en España. Con esta campaña, el objetivo de la Alianza para la prevención del cáncer de colon en nuestro país es concienciar sobre la necesidad de tomar medidas para su prevención y promover los programas poblacionales de detección precoz de cáncer colorrectal en personas con riesgo de sufrirlo.
El diagnóstico precoz del cáncer de colon en personas que no manifiestan síntomas se hace a través de pruebas como un análisis de sangre oculta en heces y/o una colonoscopia. El endoscopio, que se introduce por el ano, deja visualizar el interior del colon y el recto; en su parte distal, además de una fuente de luz, tiene unas pinzas que permiten la extracción de tejido para realizar una biopsia y extirpar pólipos, principales precursores de este tumor si no se eliminan a tiempo, en el caso de que no sean demasiado grandes. Los pólipos son formaciones en forma de masa en el revestimiento del colon o del recto y, por norma general, son benignos, exceptuando los adenomatosos. Estos, con el tiempo, se pueden convertir en cáncer de colon, sobre todo, si son mayores de un centímetro.
Con riesgo a sufrir cáncer de colon
El cáncer colorrectal puede afectar a mujeres y hombres por igual. No obstante, hay unos grupos de población con factores que aumentan el riesgo de desarrollarlo y, por ello, deben consultar al profesional de salud de referencia que les explicará las medidas para tomar en cada caso.
- Personas sanas mayores de 50 años de ambos sexos. El cáncer de colon es una dolencia que predomina en ancianos, aunque la edad media ronda los 69 años y también pueden sufrirla personas más jóvenes. Se sabe que con la edad se incrementa la posibilidad de aparición de pólipos en el colon. Si bien este grupo de población es considerado de riesgo medio, las comunidades científicas no tienen establecida cuál es la mejor estrategia para el cribado ni con qué periodicidad.
- Personas con antecedentes familiares (abuelos, padres, hermanos…) de cáncer de colon o pólipos. Datos de la SEOM señalan que hasta un 25% de los pacientes tienen un familiar afectado por la enfermedad y en menos de un 10% hay un componente hereditario que lo explica.
- Las personas con antecedentes personales de pólipos o cáncer tienen un riesgo aumentado de desarrollar un nuevo tumor.
- Personas con enfermedades inflamatorias intestinales, como colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
Sin embargo, en el desarrollo de cáncer de colon también intervienen algunos factores modificables, como una dieta con exceso de grasas saturadas y carencia de frutas y verduras, el sedentarismo, el hábito tabáquico y el consumo de alcohol. Por ello, los especialistas recomiendan adoptar un estilo de vida saludable, que incorpore una dieta sana y equilibrada, el abandono de hábitos tóxicos y la práctica de actividad física de manera habitual.
Hay síntomas que se relacionan con el cáncer de colon, aunque también pueden estar provocados por otras enfermedades. Por ello, se recomienda acudir al médico ante:
- Presencia de sangre (de color rojo o negro) en las heces.
- Cambio en las deposiciones: diarrea, estreñimiento o intercalados.
- Heces de forma más estrecha.
- Sensación de no vaciar por completo cuando se va al baño.
- Dolor abdominal.
- Cansancio exagerado o pérdida de peso sin causa aparente.