Desde hace años, los médicos utilizan la ecografía como herramienta de diagnóstico para las lesiones deportivas. Ahora, la medicina se pone en manos de la tecnología 3D para conseguir una clara mejora de la calidad de la imagen, lo que repercute no sólo en un mejor diagnóstico, sino en un tratamiento y posterior recuperación más eficiente.
Un estudio, recogido por el Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC), pone de manifiesto que las nuevas tecnologías tridimensionales aplicadas a la ecografía tradicional mejoran notablemente la calidad de la imagen. Las aplicaciones, ya utilizadas en el ámbito ginecológico, son de gran utilidad para realizar un diagnóstico cada vez más fiable y un tratamiento más efectivo de las lesiones del aparato locomotor.
Esta investigación, liderada por José Fernando Jiménez Díaz, especialista en Medicina del Deporte de la Universidad de Castilla la Mancha, analizó la utilidad de estas nuevas aplicaciones en las lesiones traumáticas, sobre todo los traumas producidos en el contexto laboral o deportivo.
Los científicos compararon dos equipos portátiles de ultrasonografía de alta definición. Uno de ellos contaba con las aplicaciones tradicionales, y el otro integraba en su sistema la imagen armónica, la ecografía compuesta en tiempo real, la visión panorámica, la imagen en 3D y el convex virtual.
Se compararon cinco tipos de lesiones: contusión muscular, lesión muscular intrínseca, tendinosis rotuliana, tendinosis calcificante del tendón rotuliano y rotura parcial del ligamento lateral interno de la rodilla. Los resultados mostraron que los nuevos sistemas integrados mejoraban la visualización de los tejidos lesionados en todos los tipos de lesión analizados.
«Las aplicaciones de esta tecnología se centran no sólo en el diagnóstico, sino también en el tratamiento de las lesiones», explica Jiménez Díaz. «La nueva rama de la ecografía, conocida como ecografía intervencionista, permite eludir algunas de las cirugías que antes eran inevitables al aplicar el tratamiento eco-dirigido sobre el aparato locomotor».
Futuro prometedor
Las aplicaciones tridimensionales en los equipos portátiles o compactos se aplican en los grandes hospitales desde inicios de 2007 en el diagnóstico de las lesiones traumáticas de partes blandas.
«La mejora de la calidad de la imagen no es para entregar una foto más bonita al paciente, sino para mejorar la visualización de las estructuras, sobre todo para las lesiones de pequeño tamaño o de difícil interpretación. Es ahí donde la experiencia en 3D puede conseguir una óptima recuperación de los traumatismos», afirma el especialista.
Los expertos se muestran optimistas con el futuro de este tipo de tecnologías. «La eclosión de la ecografía en el diagnóstico de las lesiones traumáticas todavía está por venir. Espero que se mejoren aún más las aplicaciones para la visualización de estructuras que todavía consideramos semi-ciegas. La mejora va a permitir hacer un diagnóstico más seguro y aplicar un tratamiento más fiable», concluye Jiménez Díaz.