Los hombres con cáncer avanzado de próstata que toman una dosis alta de vitamina D en una píldora junto con quimioterapia tienen una esperanza de vida de unos ocho meses más que aquellos que reciben quimioterapia y placebo. Ésta es la conclusión de un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Ciencia y Salud de Oregón (EE.UU.), que se ha presentado en la Conferencia Europea del Cáncer que se celebra estos días en Paris.
La píldora de vitamina D se denomina DN-101 y está diseñada específicamente para ser utilizada como un tratamiento contra el cáncer. Es una especie de calcitriol, una hormona que se produce por vías naturales y que es una forma biológicamente activa de vitamina D.
Los autores del trabajo evaluaron la administración de la DN-101 junto con el docetaxel, fármaco comercializado por la empresa Aventis como «Taxotere», en pacientes de cáncer avanzado de próstata que no respondían ya a la terapia hormonal.
Según los científicos, la esperanza de vida estimada de los enfermos que recibieron la DN-101 con docetaxel fue de 24,5 meses, mientras que los que tomaron placebo con el fármaco tuvieron una supervivencia media de 16,4 meses.
Los investigadores explican que la DN-101 parece también proteger frente a los efectos secundarios de la quimioterapia. En un análisis exploratorio, descubrieron que los efectos secundarios graves se daban en un 28% de los pacientes que tomaban DN-101 con docetaxel, frente al 41% de los que recibían placebo. Los pacientes del grupo de estudio con vitamina D experimentaron además menos episodios tromboembólicos y gastrointestinales.