La Oficina de Control de Alimentos de Alemania ha alertado de que uvas de mesa importadas por este país desde Chile, España, Grecia, Italia y Sudáfrica presentan una fuerte contaminación por pesticidas.
En los análisis realizados por dicho departamento se encontraron restos de 36 pesticidas diferentes, señaló el Ministerio de Agricultura del Estado Federado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental (este).
Las autoridades alemanas indicaron que no hay por qué temer riesgos inmediatos para la salud de los consumidores. «Es suficiente con lavar intensamente la fruta», afirmó el ministro de Agricultura, Till Backhaus. «Pero los porcentajes preocupan, porque la suma de los restos de diferentes sustancias hace que las cantidades lleguen a niveles intolerables», añadió.
Así, en el 15% de las frutas analizadas se registraron incluso valores que superan los límites máximos permitidos por la Unión Europea (UE), apuntó Backhaus. En las pruebas realizadas con uvas de Grecia e Italia, casi el 33% se encontraba en esta situación.