El humo del tabaco en los fumadores pasivos provoca daño celular e inflamación de los tejidos de manera «inmediata», según un estudio publicado por el «Surgeon General» de Estados Unidos y destacado en España por el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT). Además, la exposición repetida debilita la capacidad del cuerpo para «sanar el daño», apunta el trabajo.
La investigación, titulada «¿Cómo el humo del tabaco causa la enfermedad?», indica que los productos químicos en el humo del tabaco llegan a los pulmones de manera rápida cada vez que se inhalan y causan daño inmediato. La inhalación de la más mínima cantidad de humo de tabaco también puede dañar el ADN, lo que puede conducir al cáncer.
También se explica en este informe por qué no es fácil dejar de fumar. Según las investigaciones realizadas, los cigarrillos en la actualidad liberan nicotina «con mayor rapidez y eficacia que los cigarrillos de hace años», aseguran los autores del estudio a partir de la evidencia científica acumulada en los últimos 25 años en Estados Unidos.
El estudio describe cómo el delicado revestimiento de los pulmones se inflama en cuanto se expone a la mezcla de químicos en el humo del cigarrillo y cómo esos mismos químicos dañan rápidamente los vasos sanguíneos y hacen que la sangre sea más propensa a coagularse.