Las personas que se han recuperado de un cáncer tienen más del doble de riesgo de padecer un segundo cáncer primario del mismo tipo, mientras que el riesgo de un segundo cáncer primario de otro tipo es solo ligeramente mayor, según un estudio publicado en el «Canadian Medical Association Journal» (CMAJ). Un equipo de investigadores daneses analizó datos de toda la población de Dinamarca (7.493.705 personas), desde 1980 a 2007, para determinar si el riesgo de cáncer secundario está relacionado con el tipo de cáncer que se encuentra en primera instancia.
En alrededor del 10%, unas 765.255 personas, había uno o más diagnósticos de cáncer primario, de un total de 843.118 diagnósticos. Al 15% de los supervivientes de cáncer en todo el mundo se les diagnostica un segundo cáncer primario. Los investigadores encontraron un riesgo 2,2 veces mayor de desarrollar un segundo cáncer primario del mismo tipo en los sobrevivientes de cáncer, mientras que el riesgo de un tipo diferente de cáncer primario fue de 1,1 veces.
La investigación refleja que el riesgo varía en función del tipo de cáncer. El riesgo de un segundo tipo de cáncer del mismo tipo se redujo después del cáncer de próstata y aumentó tras el sarcoma, mientras que el riesgo de un segundo cáncer de distinto tipo también se redujo después del cáncer de próstata y aumentó después del cáncer de laringe. Los autores, que produjeron una tabla que contiene las estimaciones de riesgo para 27 tipos de cáncer, sugieren que este catálogo podría ser valioso para los estudios sobre el esta enfermedad.
«El contraste entre el riesgo 2,2 veces mayor de desarrollar un segundo cáncer primario del mismo tipo que el primero y el riesgo 1,1 veces mayor de que sea diferente del primer cáncer sugiere que las características de cada paciente en particular estaban involucradas», afirma el doctor Stig Bojesen, del Hospital Herlev, el Hospital Universitario de Copenhague y la Universidad de Copenhague, quien añade que «el riesgo de un segundo cáncer primario se debe, probablemente, a factores genéticos y al estilo de vida».
Los científicos también analizaron la asociación entre el primer cáncer y el consumo de tabaco, ya que se sabe que aumenta el riesgo de muchos tipos de cáncer. «Nos sorprendió ver que, en nuestro estudio, el riesgo de otros cánceres relacionados con el tabaco en pacientes que sobreviven a un cáncer relacionado con el tabaquismo aumentó solo en 1,2 veces», comenta el doctor Bojeseny. Los autores creen que, en general, los factores de riesgo que actúan a largo plazo parecen ser específicos de cada paciente. Sin embargo, los efectos del tratamiento y un aumento (o disminución) en la vigilancia del diagnóstico podrían cambiar el riesgo de cáncer.