El último miércoles de marzo se conmemora el Día Nacional del Trasplante, una fecha promovida por la Organización Nacional de Trasplantes(ONT), organismo coordinador de carácter técnico perteneciente al Ministerio de Sanidad. España es el país con mayor tasa de donación de todo el mundo. Las donaciones se realizan siempre de forma altruista y todo el proceso es cubierto, desde el punto de vista económico, por el Sistema Nacional de Salud (SNS). El objetivo de este día es fomentar una cultura de donación de órganos y dar una oportunidad de vida a pacientes en espera, que muchos de ellos crónicos o terminales. El año pasado se hicieron en nuestro país 4.425 trasplantes de los que 336 fueron de pulmón. En este artículo explicamos más sobre este tipo de intervención y la importancia de la fisioterapia para la rehabilitación pulmonar tras un trasplante.
¿Cuándo se hace un trasplante de pulmón?
El trasplante como opción se analiza muy detalladamente y se estudia la situación de la persona en muchos aspectos. Puede llegar a ser una alternativa para enfermedades respiratorias en una fase muy avanzada y cuando el paciente ha agotado una serie de recursos en tratamientos de forma previa. Suele darse en pacientes con enfermedades crónicas avanzadas, cuando su esperanza de vida no es mayor de dos o tres años.
Las patologías más comunes de los pacientes que reciben un trasplante pulmonar son las siguientes:
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
- Fibrosis pulmonar.
- Hipertensión pulmonar.
- Bronquiectasias.
- Alfa-1 antitripsina.
- Fibrosis quística (la enfermedad causante del mayor porcentaje de trasplantes en edad pediátrica).
¿Cuáles son los requisitos para realizarse un trasplante pulmonar?
Existen una serie de guías médicas y normativas donde se define el perfil del paciente que cumple con los criterios para realizar el trasplante. Hay muchos otros factores que complejizan el escenario para avanzar con este procedimiento.
- Primero, para que pueda realizarse el trasplante, tanto el donante como el receptor deben cumplir una serie de requisitos: por ejemplo, la persona receptora debe estar dentro de una edad permitida, se valorará si el paciente tiene patologías asociadas como una cardiopatía, si tienen adicciones al alcohol o a las drogas o si son buenos cumplidores cuando se pauta un programa médico.
- Una vez incluido el paciente en la lista para trasplante, este queda a la espera de un donante que sea válido, ya sea por grupo sanguíneo, por la distancia geográfica o por el tamaño del órgano del donante, ya que debe ajustarse a su receptor.
- Además, quien recibirá el órgano debe estar dispuesto a pasar por ese camino. No olvidemos que la persona se encuentra en una situación complicada de estado de salud y en cuanto a su calidad de vida. El receptor debe estar muy preparado a nivel físico, pero también a nivel psicológico por el estrés emocional al que pueda estar sometido.
¿Por qué es tan importante la fisioterapia en un trasplante de pulmón?
La fisioterapia es una disciplina fundamental en el proceso de trasplante pulmonar en todas sus etapas. Para la realización del trasplante y para que sea exitoso, varios expertos de distintas especialidades trabajan juntos: entre ellos, neumólogos, cirujanos torácicos, cardiólogos, enfermeros y fisioterapeutas.
La rehabilitación pulmonar es un tratamiento que aporta al paciente una mejora en su calidad de vida y su capacidad funcional. En este sentido, la fisioterapia desempeña un papel esencial. Una de las funciones del fisioterapeuta será realizar un programa de ejercicio terapéutico, tanto para la instancia previa de la intervención como para la posterior. Está demostrado que los pacientes que llegan al momento del trasplante con mayor capacidad de ejercicio luego consiguen una recuperación más rápida y óptima de su estado de salud.
Fisioterapia respiratoria antes del trasplante
En la fase pretrasplante o preoperatoria, el objetivo de la fisioterapia es que el paciente llegue en las mejores condiciones posibles a la intervención. Este aprendizaje y trabajo temprano le ayuda a que adelante su recuperación, entre otros.
Antes del trasplante, la calidad de vida se encuentra limitada, así como la capacidad para hacer ejercicio. La fuerza que presenta en sus músculos suele estar disminuida y también se verá afectada en la fase posterior a la cirugía, ya que el paciente deberá pasar por una estancia en cuidados intensivos, permanecer hospitalizado durante unas semanas o, incluso, la medicación indicada podría afectar a sus músculos.
Fisioterapia respiratoria después del trasplante
En la fase postrasplante o posoperatoria, el fisioterapeuta ayuda a la persona trasplantada a readaptar y aprender los mejores patrones respiratorios posibles. También desarrolla un programa de entrenamiento adecuado para que el paciente pueda mantener su condición física y un buen estado de salud.
En esta instancia, el trasplantado puede presentar dificultades para hacer respiraciones completas, debilidad de la musculatura, dolores en la parte del tórax al respirar o al toser. Por ello, la intervención del fisioterapeuta debe comenzar en cuanto el paciente se encuentra estable aún en la UCI (unidad de cuidados intensivos).
Se trabajará para recuperar la capacidad pulmonar y la fuerza de los músculos respiratorios, así como la fuerza de la musculatura del resto del cuerpo (sobre todo, de los miembros inferiores). En esta fase, se buscará aumentar la capacidad de ejercicio y se adaptarán técnicas respiratorias para poder expectorar posibles secreciones que la persona pueda presentar. También se buscará evitar el dolor producido por la tos mediante otras formas de realizarla más eficaces y menos bruscas, e incluso enseñarle de nuevo un correcto patrón respiratorio.