El Ministerio de Sanidad y Consumo anunció ayer, con motivo de la celebración hoy del Día Mundial contra el Parkinson, que gracias a un convenio entre el Instituto de Salud Carlos III y la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, ha ampliado hasta el próximo mes de diciembre un estudio multicéntrico sobre el uso tutelado de tratamientos quirúrgicos contra el Parkinson en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
Según Sanidad, el objetivo de este trabajo es evaluar la efectividad de la cirugía contra este mal, y las condiciones de aplicación de las técnicas utilizadas, con el fin de garantizar su eficacia y su máxima seguridad. En él participan dieciocho centros públicos y dos privados, distribuidos por todo el territorio nacional, bajo la dirección técnica de la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía.
Con motivo de esta jornada contra el Parkinson, el departamento que dirige Ana Pastor recordó que en España más de 100.000 personas padecen esta enfermedad. Se trata de una patología neurodegenerativa provocada por la pérdida de la capacidad de producir dopamina y caracterizada por síntomas como temblor en reposo, rigidez articular, movimientos lentos y afectación de los reflejos posturales.
La población mayor de 64 años es la más afectada por el mal, situándose la prevalencia en el 1,6% a partir de dicha edad. «En los hombres, el pico de mayor prevalencia se da en los 67 años y en los 72 en el caso de las mujeres, aunque se puede desarrollar en personas mucho más jóvenes, lo que provoca discapacidad y deterioro de la calidad de vida de los afectados», señaló el ministerio.
Tratamientos
El tratamiento del Parkinson, inicialmente farmacológico, va destinado fundamentalmente a controlar los síntomas, puesto que a día de hoy no existen terapias capaces de frenar o revertir la enfermedad. Sin embargo, en un elevado número de pacientes los medicamentos no producen un beneficio clínico satisfactorio. En estos casos se estudian las posibilidades de cada enfermo de ser intervenido quirúrgicamente, con el objetivo de eliminar o reducir su sufrimiento.
Las diferentes técnicas quirúrgicas existentes actualmente en España están sometidas a «uso tutelado» desde 1999 por acuerdo del Pleno del Consejo Interterritorial de Salud, «a fin de garantizar la seguridad de los enfermos». De todas ellas, las más utilizadas son las técnicas ablativas (palidotomía y talatomía), la estimulación cerebral profunda (a nivel del tálamo, pálido o núcleo subtalámico) y los transplantes celulares que, por el momento, se encuentran en fase experimental.
Para evaluar estas técnicas, se desarrolló previamente un protocolo en colaboración con las sociedades científicas implicadas y especialistas clínicos participantes en el mencionado estudio, en el que se establecen criterios de inclusión y exclusión de pacientes candidatos a este tipo de intervenciones, las variables de estudio, el cronograma de actuaciones y el seguimiento de los enfermos antes y después de la cirugía.
110 pacientes
Hasta la fecha se han estudiado 110 pacientes, de los cuales se ha intervenido a un total de 74, mediante estimulación periférica profunda bilateral en la mayoría de los casos. Dieciocho de los enfermos operados llevan seis meses de seguimiento y tres han superado el año, según datos del ministerio. El resto han sido intervenidos recientemente, por lo cual los datos del seguimiento de estos enfermos no se conocerán hasta que acabe la recogida de los mismos, a finales de 2003.
El próximo mes de junio, la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía tiene previsto presentar al Ministerio de Sanidad, a través del Instituto de Salud Carlos III, un informe con datos preliminares sobre este trabajo. No obstante, las conclusiones definitivas sobre la eficacia y seguridad de estas técnicas quirúrgicas tendrán que esperar a 2004.
