La rehabilitación respiratoria es aceptada como una opción terapéutica efectiva en pacientes con enfermedades respiratorias crónicas como la EPOC. Incluye terapias diseñadas a medida del enfermo para el entrenamiento de la musculatura, la educación y los cambios en los hábitos de vida con los que se pretende mejorar su condición física y psicológica. No siempre se puede hacer de forma presencial, y menos en los tiempos que corren. Pero sí es posible realizarla a distancia gracias a la telerehabilitación respiratoria. En las siguientes líneas te contamos en qué consiste, qué pacientes pueden beneficiarse de ella y cómo debe llevarse a cabo para que sea efectiva.
Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), la rehabilitación respiratoria consiste en “una intervención general basada en una exhaustiva evaluación del paciente seguida de terapias diseñadas a medida para, entre otras, el entrenamiento de musculatura, la educación y los cambios en los hábitos de vida, con la que se pretende mejorar la condición física y psicológica de las personas con enfermedad respiratoria crónica y promover la adherencia a conductas para mejorar la salud a largo plazo”.
Ya en 2011 la Organización Mundial de la Salud (OMS) informaba de que muchas personas con discapacidad no tienen la oportunidad de acceder a servicios de salud y de rehabilitación en forma presencial, es decir, no reciben los servicios necesarios según su discapacidad. Y hoy en día, debido a la pandemia mundial vivida a causa del SARS-CoV2, esto se ha hecho más prevalente, ya sea por no poder asistir a los centros médicos o por el propio colapso del sistema sanitario. Y no hay que olvidar que el colectivo que necesita una rehabilitación crónica, constante en el tiempo, son personas con muchas comorbilidades, las cuales la infección por el nuevo coronavirus puede resultar fatal.
Pero la situación actual ha hecho que el uso de las Tecnologías de Información y Comunicaciones (TICs) en salud haya crecido de manera significativa, lo que ha favorecido el seguimiento y tratamiento de las personas más vulnerables a través de la telesalud o soluciones en salud digital. Y en este contexto ha cobrado relevancia la telerehabilitación.
¿Qué es la telerehabilitación?
La telerehabilitación es un método emergente que ofrece programas de atención en rehabilitación más allá del hospital o de un centro sanitario (ya sea público o privado), a través de los dispositivos y recursos online. Así se consigue llegar a un porcentaje mayor de la población, sobre todo a aquellos que tienen difícil acceso geográfico o social.
Con estos programas se pretende mejorar el acompañamiento y seguimiento de los pacientes y su adherencia al tratamiento multidisciplinar, fomentando, entre otros, ese cambio de conducta necesario para aumentar la actividad física. Evitar el sedentarismo nos lleva a una disminución de exacerbaciones, visitas a urgencias o ingresos hospitalarios.
¿A quién va dirigida la telerehabilitación respiratoria?
Fundamentalmente, hay tres grupos de personas a las que se aplica este tipo de rehabilitación:
- 1. Pacientes que por su afectación pulmonar necesitan de un programa de rehabilitación respiratoria (PRR), en las fases estables leve-moderadas y después de un episodio de reagudización de la propia enfermedad.
- 2. Pacientes que precisan de un seguimiento y acompañamiento después de realizar un PRR presencial. En este caso se afianza la adherencia al tratamiento y se evalúa la pauta de ejercicios por si hubiera que modificarla.
- 3. Pacientes que hayan superado la covid-19. Se pone principalmente el foco en los que han requerido de ingreso hospitalario prolongado o que presentan secuelas de la función pulmonar importantes y/o tolerancia al ejercicio.
Qué debe contemplar un programa de telerehabilitación respiratoria
- Educación para la salud del paciente y de sus familiares.
- Técnicas de fisioterapia respiratoria (técnicas ventilatorias y de drenaje de secreciones).
- Programa de ejercicio terapéutico (entrenamiento aeróbico, entrenamiento de fuerza de musculatura periférica y musculatura respiratoria).
- Si es posible, se dará también soporte psicológico y/o nutricional.
Para que todo esto se pueda llevar a cabo es preciso que se le proporcione al paciente un medio con el que poder comunicarse (llamada telefónica, videollamada, etc.). Y si se dispone de dispositivos para la monitorización y motivación del paciente, será mucho mejor.
Por otro lado, es importante que el paciente entienda que para hacer un seguimiento efectivo de su estado de salud, debe registrar algunos parámetros y hacerlo en una plataforma segura, donde se garantice el resguardo de sus datos. Habrá parámetros que serán de registro diario, mientras que otros serán periódicos, cada ciertos meses, para evaluar si el programa está siendo efectivo y reevaluar al paciente de nuevo. Asimismo, el registro de estos datos genera reportes que son fundamentales para que el equipo médico y de salud pueda evaluar y monitorizar la evolución del paciente en base a información certera.
En HappyAir ofrecemos la posibilidad de que las personas más vulnerables y afectadas (los pacientes crónicos) en estos momentos puedan seguir haciendo sus programas de rehabilitación con la supervisión de coaches respiratorios (fisioterapeutas respiratorios) que les guiarán y acompañarán en todo el proceso. Todo ello será a través de una plataforma digital, donde el paciente podrá realizar sus registros y obtener el material necesario para entender su enfermedad y seguir un plan de cuidados individualizado, con toda seguridad.
Si tienes dudas o necesitas información, no dudes en contactar con nosotros escribiéndonos a cuentanos@lovexair.com.
- Normativa SEPAR sobre rehabilitación respiratoria (2014).
- Guía SEPAR para la teleconsulta de pacientes respiratorios (2020).
- ‘Rehabilitación respiratoria. Mantenimiento de los beneficios: ¿tele-rehabilitación?’. Juan B. Gáldiz Iturri y Amaia Gorostiza Manterola. Medicina respiratoria 2013.
