Las consejerías de Educación, Formación y Empleo y Sanidad del Gobierno de Murcia desarrollan un programa «pionero en España» para la detección, diagnóstico y atención a los alumnos con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), que ha permitido ya prestar atención especializada a casi 200 alumnos de los centros escolares de la Región.
El consejero de Educación, Formación y Empleo, Constantino Sotoca, explicó que el protocolo se encarga de coordinar todas las actuaciones que realizan los servicios sanitarios y educativos a la hora de identificar, intervenir y realizar el seguimiento del alumnado que presenta un trastorno de hiperactividad.
De esta forma, en el momento que se detecta o se observa algún posible caso de hiperactividad, el equipo de orientación del centro realiza un informe completo, en el que se evalúan sus capacidades, su nivel de competencia curricular y su estilo de aprendizaje, para adaptar las medidas educativas correspondientes. Si se confirma el trastorno, se remite el informe con los resultados a su pediatra para el seguimiento y para su derivación al psiquiatra que ha de prescribir el tratamiento farmacológico.
«Es una actuación integral, que abarca las dimensiones personales, educativas y sociales y que permite mejorar el rendimiento académico de los alumnos, así como luchar contra el fracaso escolar al que muchos de ellos se enfrentan si no se actúa», aseguró el titular de Educación.
La Consejería de Educación ultima ahora las gestiones para poner en marcha el equipo de Orientación de Trastornos del Aprendizaje que, previsiblemente, comenzará a funcionar a lo largo del próximo año, y que completará la atención que actualmente se presta a estos alumnos. De este modo, la Consejería podrá abordar la atención de los alumnos con hiperactividad desde todos los niveles.
Se comenzará, tal y como ocurre en la actualidad, por la atención temprana desde el inicio de la etapa formativa en los centros de educación infantil y continuará con la detección en los centros escolares, a través de los equipos generales, integrados por profesores, orientadores del centro y pediatras. Ellos serán quienes diagnostiquen y realicen un informe de orientación. Finalmente, será el nuevo equipo de Orientación de Trastornos del Aprendizaje quien diseñe, a petición de los equipos generales, las actuaciones individualizadas más adecuadas a cada caso.