Tres meses después de que el juez y el fiscal decidieran archivar el llamado caso Baxter, la Clínica Virgen del Consuelo de Valencia ha reclamado a la multinacional farmacéutica una indemnización por los graves daños y perjuicios que el suceso provocó al centro sanitario.
Baxter aceptó en su día su responsabilidad por la muerte de seis pacientes de hemodiálisis debido al uso de sus dializadores, y pactó una indemnización millonaria con las familias, pero la clínica valenciana considera que no ha sido suficiente.
Demanda civil
Los abogados de la clínica presentaron ayer ante el juzgado de instrucción número 16 de Valencia una demanda civil contra Baxter, alegando que el caso provocó grandes pérdidas tanto de imagen como económicas al centro sanitario, ya que su servicio de hemodiálisis permaneció cerrado durante cuatro meses y dos de sus directivos fueron imputados, aunque se les exculpó finalmente.
En este sentido, alegan que a pesar de que también se registraron muertes en centros de Madrid y Barcelona, sólo la unidad valenciana fue cerrada, lo que les causó un grave «daño moral».