La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha revisado la exposición de las personas a un grupo diverso de mezclas de hidrocarburos conocido como aceites minerales (MOH). El trabajo se ha fijado en la dieta de los consumidores, a través del Panel de Expertos de Contaminantes de la Cadena Alimentaria y a petición de la Comisión Europea. Su uso como aditivos alimentarios, envases y otras aplicaciones en alimentación hace que los consumidores estén expuestos a una gran variedad de hidrocarburos de aceite mineral a través de los alimentos, de ahí la necesidad de evaluarlos. Conocer los usos y tipos de aceites minerales es útil para saber cuáles son los más perjudiciales, en qué grado y cuáles son las principales fuentes de exposición.
Los consumidores están expuestos a una gran variedad de hidrocarburos de aceite mineral a través de los alimentos. Los aceites minerales constituyen un grupo muy diverso de mezclas de hidrocarburos que contienen miles de compuestos químicos de diferentes estructuras (lineales, ramificadas o cíclicas) y tamaños. Derivados sobre todo del petróleo crudo, también pueden elaborarse de forma sintética a partir de carbón, gas natural y biomasa. La composición química de la mayoría de las mezclas MOH se desconoce e, incluso, a menudo varía entre un lote y otro. Las especificaciones se expresan con frecuencia en términos de viscosidad, en relación con las aplicaciones de los productos, y no en términos de composición química, por lo que es muy difícil determinar su naturaleza exacta.
Usos de los aceites minerales
Entre los usos de los aceites minerales en alimentación, destacan los materiales de embalaje como envases de papel
Estas mezclas de aceites minerales, muy complejas, tienen una amplia variedad de aplicaciones industriales y domésticas. Entre sus usos en el sector alimentario destacan, sobre todo, los materiales de embalaje como envases de papel o cartón reciclado, tintas de impresión en estos materiales, así como aditivos en la fabricación de plásticos y revestimientos que pueden entrar en contacto con los alimentos y ser fuente de exposición de estas sustancias.
Ciertos MOH también se utilizan como aditivos alimentarios, auxiliares tecnológicos y coadyuvantes (agentes antiadherentes en panadería/repostería y coberturas en confitería o supresores de polvo utilizados en grano de cereal para consumo humano). Por último, pueden estar presentes en los alimentos como contaminantes ambientales. Es el caso de los lubricantes.
Tipos de aceites minerales e impacto en la salud
El impacto potencial para la salud humana del MOH es muy variable, en función de la naturaleza química de los aceites minerales. Los expertos del Panel CONTAM de la EFSA identificaron dos tipos principales de MOH relevantes para la seguridad alimentaria: los hidrocarburos saturados (MOSH) y los aromáticos (MOAH). Los hidrocarburos aromáticos (MOAH) pueden actuar como carcinógenos genotóxicos (pueden causar cáncer y dañar el ADN, el material genético de las células), mientras que algunos hidrocarburos saturados (MOSH) pueden acumularse en los tejidos humanos y provocar efectos nocivos en el hígado.
La exposición a los aceites minerales a través de la dieta es mayor entre los consumidores más jóvenes que entre los adultos y ancianos
Desde el punto de vista químico, los hidrocarburos saturados de aceites minerales (MOSH) constan de alcanos lineales y ramificados, junto con alquilo sustituido-ciclo-alcanos (parafinas y aceites nafténicos), mientras que los minerales hidrocarburos aromáticos (MOAH) incluyen sobre todo alquil-sustituidos hidrocarburos poliaromáticos. Según su viscosidad, también pueden clasificarse en viscosidad media y baja (con una estructura entre 10-25 carbonos y una masa molecular de 300-500), viscosidad alta (con C30 y una masa molecular de al menos 500) y ceras microcristalinas (con una estructura entre C20-C60 y una masa molecular de 300-750 o más), utilizadas en algunos casos para tratar la superficie de chicles, dulces y frutas como melones, papayas y aguacates.
El grupo de expertos también ha llevado a cabo una evaluación de la exposición del consumidor a los MOH. De los datos disponibles, se han apreciado bajos niveles de MOHS (saturados) en general en todos los grupos de alimentos. Sin embargo, se han detectado niveles altos en las categorías de «Pan y panecillos» y «Cereales para el consumo humano», debido al uso de agentes antiadherentes y de agentes para hacer los granos más brillantes, respectivamente. La presencia de MOH tanto saturados como aromáticos en alimentos secos, como mezclas para postres o fideos, puede atribuirse, en parte, a los papeles y cartones usados en los embalajes.
Por grupos de edades, y siempre según la evaluación del Panel CONTAM, la exposición a través de la dieta fue mayor entre los consumidores más jóvenes que entre los adultos y ancianos. La exposición estimada de MOSH varió entre 0,03 – 0,3 mg/Kg de peso corporal por día, con una mayor exposición en los niños.
Aún hay bastante incertidumbre con respecto a la composición química de las mezclas de MOH a las que están expuestos los seres humanos, así como acerca de la amplia gama de fuentes de exposición. El grupo de especialistas concluye que puede haber cierta preocupación para algunos consumidores, en especial, entre quienes siempre adquieren la misma marca de alimentos o los compran en la misma tienda. Estos pueden tener una exposición regular y continuada a alimentos con altos niveles de MOH.
Respecto a los riesgos asociados con la exposición al grupo de hidrocarburos aromáticos, los expertos no han sido capaces de expresarlos en términos cuantitativos por la falta de información, tanto en la exposición como en la toxicología. Sin embargo, y en vista de las propiedades carcinógenas de este tipo de aceites minerales, el Panel de Expertos consideró la exposición del consumidor a estas sustancias de gran interés de estudio.
El establecimiento de nuevos valores de referencia basados en la seguridad de los MOH utilizados como aditivos alimentarios estaba fuera del alcance de este dictamen, pero el grupo CONTAM concluyó que se justifica una revisión de la actual ingesta diaria admisible (IDA) para algunos aceites minerales. El dictamen constituye una base adecuada para la revisión de la IDA para los MOH de viscosidad baja o media, y se aconseja su reevaluación. El Comité científico de la alimentación humana (SCF) y el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) ya evaluaron estos productos. En su dictamen, la EFSA también recomienda identificar las posibles fuentes de contaminación en los diferentes puntos de la cadena de producción alimentaria para diseñar un programa de vigilancia de estos compuestos. El grupo CONTAM considera, por el contrario, que la revisión de las IDA para los MOH de viscosidad alta no constituye una prioridad.
Por último, el dictamen de la EFSA también hace recomendaciones para mejorar los métodos de análisis y recopilación de datos y vigilancia futura. La EFSA ya realizó un estudio sobre estos compuestos, los aceites minerales, en tintas de impresión utilizadas en los envoltorios y envases de cartón en contacto con los alimentos, donde se descartaba esta vía como fuente de exposición relevante para las personas. Con todo ello, considera que a raíz de esta nueva revisión habrá que continuar con la investigación sobre otras fuentes de exposición a estos hidrocarburos.