La intolerancia al gluten o enfermedad celíaca es un problema frecuente para el que, hoy en día, no hay disponible ningún tratamiento específico. Por este motivo, para las personas afectadas es vital una correcta alimentación basada en productos que no contengan gluten. Dado que esta proteína se encuentra en muchos alimentos, un correcto etiquetado de los productos es esencial para garantizar el buen estado de salud de los celíacos. Esta tarea se facilitaría con un nuevo dispositivo que, mediante una señal lumínica, indica qué alimentos carecen de gluten y, por lo tanto, se pueden comprar sin riesgos.
La utilización de sofisticada tecnología no es siempre imprescindible para aportar soluciones. En ocasiones, una idea sencilla, basada en una técnica ya conocida, puede suponer un gran cambio en la vida de muchas personas. Podría ser el caso de un lector de códigos de barras que facilitará de forma notable la identificación de los alimentos con gluten. Es un dispositivo del tamaño de un mando de garaje que permitirá saber de forma rápida y segura si un alimento es apto o no para los afectados de celiaquía. El proyecto, bautizado como Código EAN, lo ha desarrollado la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE) en colaboración con la marca Santiveri.
Lector de códigos de barras
El lector es una herramienta sencilla y rápida de utilizar, además de fácil de transportar. El dispositivo lee el código de barras y emite una señal lumínica. Si ésta es verde, el producto es apto para celíacos. Por el contrario, si se enciende una luz roja, el producto contiene la glicoproteína en cuestión. El dispositivo cuenta también con una base de datos realizada por la FACE, con un listado de alimentos aptos para celíacos. Este registro se publica de forma anual y, hasta la fecha, se utiliza como manual para saber si un alimento contiene o no gluten.
El nuevo lector de códigos de barras pretende facilitar la tarea de revisar cada alimento de forma manual
El objetivo del lector de barras es facilitar la tediosa tarea de revisar cada alimento de forma manual. Se espera que esté disponible a finales de año, ya que necesita la citada base de datos y ésta no se publica hasta noviembre. No obstante, además de este novedoso proyecto, la Federación de Asociaciones de Celíacos de España dispone de otros mecanismos de consulta rápida.
Es el caso del servicio de atención mediante SMS que permite, en poco tiempo, saber si un producto está libre o no de gluten. Este servicio funciona de un modo parecido al lector y utiliza como referencia la misma lista de productos aptos para celíacos que será la base de datos de éste.
La importancia del etiquetado
El único modo de combatir la enfermedad celíaca es mediante la dieta. Por este motivo, un correcto etiquetado de los productos es fundamental para garantizar la salud de las personas enfermas. Se calcula que la intolerancia al gluten afecta a cerca del 1% de la población, aunque esta cifra podría ser mayor, ya que hay muchos casos sin diagnosticar. En España, se estima que hay unos 50.000 afectados y desde la FACE se trabaja a diario para mejorar su calidad de vida.
Con motivo del Día Nacional del Celíaco, que se celebró el pasado 27 de mayo, la Federación reclamó varios puntos para la mejora de la calidad de vida de los celíacos. Algunas de estas reivindicaciones incluyen un Plan de Inspección anual para garantizar la presencia o ausencia de gluten en los alimentos del mercado. Se calcula que sólo un 20% de los productos que se pueden encontrar en un supermercado son aptos para celíacos y con el Plan de Inspección se busca aumentar este porcentaje.
Por otro lado, los celíacos también piden ayudas económicas, ya que se calcula que gastan 1.500 euros más al año en alimentación que una persona sana. A pesar de que las ayudas ya están contempladas en algunas comunidades autónomas, se busca promoverlas e implantarlas en el resto. Por otro lado, los celíacos también piden más implicación de los servicios de alimentación públicos y privados, relacionada con cartas y menús de restaurantes, hospitales, escuelas y universidades, que deberían incluir más información y más menús alternativos para las personas con intolerancia al gluten.
La intolerancia al gluten o enfermedad celíaca tiene su origen en una reacción de hipersensibilidad o alergia a un componente del gluten denominado gliadina. El gluten es una proteína que se halla en cereales como el trigo, la cebada, el centeno y la espelta, de modo que puede encontrarse con facilidad en la dieta cotidiana. En presencia de gluten, las células del epitelio intestinal desencadenan una reacción alérgica que conlleva la inflamación de la mucosa del intestino delgado. Por este motivo, los primeros y principales síntomas son la diarrea y la pérdida de peso. No obstante, se ha comprobado que la enfermedad celíaca puede desarrollarse con un cuadro sintomático diferente y este hecho dificulta el diagnóstico. Algunos de estos síntomas menos típicos son: anemia, osteoporosis, cansancio crónico, irritabilidad, dolor muscular, estreñimiento, modificaciones en los ciclos menstruales, menopausia prematura e, incluso, infertilidad e impotencia.