La Unión Europea ha abierto una consulta a través de la DG AGRI, desde el pasado 15 de enero hasta el 10 de abril de 2013, con el objetivo de mejorar la eficiencia del sistema de control para los productos ecológicos. Esta consulta tiene como finalidad revisar la situación actual, de forma que se pueda ofrecer una alternativa orientada al mercado a los productores agrícolas que desean responder a la creciente demanda de productos de alta calidad respetuosos con el medio ambiente.
Los alimentos ecológicos se obtienen a través del sistema de producción ecológica regulado en la Unió Europea. Este subsector agroalimentario tiene cada vez mayor importancia. El mercado ecológico se ha desarrollado con rapidez y ha experimentado tasas anuales de crecimiento de más del 10% en las dos últimas décadas. El mercado europeo de alimentos ecológicos representa unos 20.000 millones de euros anuales, es decir, una cuota estimada del 1,5% del mercado global de alimentos.
Los elementos fundamentales para el futuro de la agricultura ecológica son, entre otros, la simplificación del marco legal (sin que ello suponga desvirtuar las normas), la coexistencia de cultivos modificados genéticamente con otros cultivos, en especial los ecológicos, y la mejora del sistema de control y del régimen de equivalencia para el comercio de productos ecológicos.
Marco jurídico de la producción ecológica
Las empresas deben respetar el mismo conjunto de normas sobre producción, transformación o etiquetado ecológicas
El marco jurídico de la UE se ha establecido para regular la producción ecológica mediante un sistema de control que abarca todas las fases de la cadena de suministro ecológico, tales como la producción en las industrias, las actividades de transformación, distribución, importación y venta al por menor de alimentos. Cada empresa de esta cadena debe respetar el mismo conjunto de normas sobre producción, transformación, distribución, etiquetado y controles ecológicos.
De acuerdo con la política agrícola común, la producción ecológica recibe ayuda financiera de la UE y está respaldada por sus políticas y leyes. Con ello se pretende reforzar la confianza de los consumidores y crear unas condiciones de competencia leal entre los productores de agricultura ecológica de los 27 países de la UE. Las normas para la producción ecológica se establecen en el Reglamento (CE) n° 834/2007 del Consejo, de 28 de junio de 2007 , sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos y por el que se deroga el Reglamento (CEE) n° 2092/91.
Claves de la consulta
La consulta se plantea para dar cobertura a aspectos clave como:
Simplificación del marco legal, sin suavizar las normas de calidad.
Coexistencia de los cultivos modificados genéticamente con la agricultura ecológica.
Mejores sistemas de control y acuerdos comerciales para los productos ecológicos.
Repercusión de las nuevas normas de etiquetado, por ejemplo, si la utilización obligatoria del logotipo europeo en todos los productos ecológicos de la UE ha dado mayor visibilidad a estos productos.
Controles. Garantizar la integridad del sector es fundamental para su desarrollo. Algunos casos recientes de fraude aconsejan aumentar los controles y aplicar las normas de manera más estricta.
Importaciones. Se ha establecido un régimen de importaciones para regular el creciente comercio internacional de productos ecológicos. La rápida velocidad a la que se desarrolla este mercado exige que se solucionen sus deficiencias para garantizar en el futuro un funcionamiento fluido del mercado de los productos ecológicos.
Mejora de la eficiencia del sistema de control para los productos ecológicos
La consulta para revisar la política ecológica de la UE se centra en mejorar la eficacia del sistema de control. La Comisión Europea realiza este tipo de consultas para asegurarse de que el sistema de control de los productos ecológicos da suficientes garantías para el cumplimiento de los requisitos en cuanto a la producción, transformación, distribución e importación ecológicas.
La consulta es muy procedente y, además, coincide con algunas de las conclusiones expresadas en el «Informe de la Comisión al Parlamento Europeo y al Consejo acerca de la aplicación del Reglamento (CE) nº 834/2007 del Consejo, sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos», publicado el año pasado. En este informe hay tres elementos para destacar:
Es preferible profundizar en los aspectos reglamentarios y de control de los productos ecológicos que ampliar el ámbito de aplicación a más productos y sectores.
Aunque la prohibición de utilizar OMG en la producción ecológica se aplica de forma correcta, es necesario volver a examinar la declaración del vendedor y hacer un seguimiento de la disponibilidad de algunos productos en versión no modificada genéticamente. Es preferible aplicar medidas preventivas y llevar a cabo actuaciones armonizadas que fijar un umbral específico de OMG en los productos ecológicos que, en las circunstancias actuales, no parece justificable.
El sistema de control se amolda en la mayoría de los casos al funcionamiento del mercado interior, si bien su aplicación adolece todavía de algunas insuficiencias. Es necesario hacerlo más eficiente. Por otra parte, aunque la aplicación del nuevo régimen de importación basado en la equivalencia ha mejorado, es conveniente racionalizarlo y existen dudas sobre la utilidad de activar el régimen de conformidad.