Un estudio de la Organización Internacional de la Salud Animal (OIE) dado a conocer ayer afirma que el cambio climático tiene «una incidencia notable» en la aparición y reaparición de enfermedades en los animales, algunas de las cuales pueden ser transmitidas al ser humano.
El informe explica que aunque la transmisión de enfermedades animales al hombre ha sido registrada desde hace siglos, el calentamiento climático y las emisiones de metano de los rumiantes han contribuido de manera creciente a la aparición de enfermedades desconocidas. «Cada vez hay más países que atribuyen al cambio climático la aparición de por lo menos una enfermedad emergente o reemergente, que afecta o que ha afectado a su territorio», declaró Bernard Vallat, director general de la OIE.
Las tres enfermedades emergentes que son citadas con mayor frecuencia por los países miembros de la OIE, 126 de los cuales participaron en la investigación, son la fiebre catarral ovina (enfermedad de la lengua azul), la fiebre del Valle del Rift y el virus del Nilo Occidental. El 71% de los países participantes en el estudio «se declararon extremadamente inquietos en cuanto al impacto esperado del cambio climático sobre las enfermedades animales», señala el estudio.
Difícil conciliación
No obstante, los objetivos de reducción de las emisiones de CO2 y la salud animal no siempre son fáciles de conciliar. Al modificar la alimentación de los animales, la intensificación de la cría de rumiantes permite limitar las emisiones de gases de efecto invernadero. Pero ello «crea también circunstancias favorables para la emergencia de enfermedades animales», no sólo debido a una mayor promiscuidad del ganado, sino también debido a una menor diversidad genética entre individuos, indica el informe.
Con el fin de contener las epizootias y las epidemias futuras, la OIE propone un fortalecimiento de la cooperación entre organismos, en particular con la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Grupo Intergubernamental sobre la Evolución del clima (GIEC).