El hecho de que muchos ciudadanos europeos tengan que pagar por usar su móvil más allá de las fronteras de su país, pero dentro de la Unión Europea, es una situación que choca con el desarrollo de un mercado único de telecomunicaciones y comercio digital entre los Estados miembros. A pesar de las constantes rebajas, sigue habiendo una diferencia sustancial en las tarifas que los usuarios pagan dentro y fuera de su país a pesar de seguir en suelo europeo, un aspecto que va en contra del fomento del comercio y la libre circulación de información en el ámbito comunitario. Por este motivo, la Unión Europea está decidida a poner fin a las tarifas de roaming en el verano de 2014. A continuación, se detallan todos los puntos de esta medida.
La medida de la eliminación de los cargos adicionales fue aprobada en votación por los comisarios europeos el pasado mes de junio y votada por unanimidad en la comisión de Industria de la Eurocámara en julio. Ahora deberá pasar por varios trámites parlamentarios antes de su aprobación definitiva este otoño.
Si todo se desarrolla según la agenda marcada, el 1 de julio de 2014 los ciudadanos de la Unión Europea podrán utilizar su teléfono móvil sin cargos adicionales
Si todo se desarrolla según la agenda marcada, el 1 de julio de 2014 los ciudadanos de la Unión Europea podrán utilizar su teléfono móvil en cualquier país miembro de la zona sin cargos adicionales a su tarifa nacional. Entonces se conocerán los planes concretos del cambio tarifario y cómo afectará a consumidores y empresas de telecomunicaciones.
Solo para ciudadanos comunitarios
Sin embargo, ya se sabe que esta desaparición de las tarifas extra solo tendrá efectos sobre ciudadanos residentes en la Unión Europea con contratos con operadores de telecomunicaciones europeos. De esta forma, los extranjeros que vivan fuera de Europa tendrán que hacer frente al roaming cuando viajen dentro de la zona del euro.
El roaming de datos ha bajado desde los 70 hasta los 45 céntimos de por megabyte descargado
Entre las condiciones para las empresas de telecomunicaciones, se espera que se anuncien medidas para contrarrestar la pérdida de ingresos que la norma les puede acarrear. Se estima que alrededor de un 10% de la facturación de las empresas de telecomunicaciones proviene del roaming, debido sobre todo a los grandes márgenes de beneficios de este peaje. De todos modos, la pérdida de rentabilidad sería transitoria, pues el previsible aumento en el uso de las redes de telecomunicaciones al eliminar este cargo permitirá la amortización de su eliminación.
Última rebaja de tarifas de roaming
De momento, este año desde el primero de julio ha entrado en vigor la segunda rebaja de las tarifas de roaming establecida por la Unión Europea para las operadoras de telefonía. Los costes del roaming de datos han bajado desde los 70 hasta los 45 céntimos de euro por megabyte descargado. Los de voz se han ajustado en los 24 céntimos de euro por minuto en las llamadas realizadas, 7 céntimos por minuto en las llamadas recibidas y 8 céntimos por envío de un SMS.
Estaba previsto que el primero de julio de 2014 hubiera una tercera reducción, quedando el coste por megabyte en 20 céntimos. Sin embargo, el fin del roaming a partir de esa fecha dejará sin validez esta disminución fijada en el calendario.
Mercado único de Telecomunicaciones
A pesar de las dificultades del proceso, desde hace unos años la Comisión Europea Intenta unificar el mercado de las telecomunicaciones en Europa para incentivar la innovación y los negocios digitales.
En el ámbito comunitario hay un centenar de empresas de telefonía móvil frente a las cuatro empresas existentes en Estados Unidos. La Unión Europea quiere que este número de reduzca mediante la generación de un espacio único que fomente las fusiones y uniones de este tipo de compañías para el despliegue más rápido de nuevas redes de telefonía, aunque las autoridades europeas también vigilarán los abusos de posición dominante.
Europa ha pasado de liderar la adopción en el despliegue de líneas 3G a formar parte del furgón de cola del 4G
Según Neelie Kroes, vicepresidenta de la Comisión Europea y responsable de la Agenda Digital, la creación de un mercado único de las telecomunicaciones podría ser de 110.000 millones de euros al año y tendría un valor para las empresas del sector de unos 800 millones de dólares durante 15 años. Además, la mejora de la conectividad en banda ancha podría originar dos millones de puestos de trabajo.
Europa ha pasado de liderar la adopción en el despliegue de líneas 3G a formar parte del furgón de cola de la siguiente generación de banda ancha móvil. Según datos de la Comisión Europea, en la actualidad Estados Unidos, Japón y Corea tienen el 88% de las suscripciones mundiales de tecnología 4G, mientras que la Unión Europea solo representa el 6%. Incluso África tiene un mayor despliegue de redes 4G que Europa.
Por este motivo, otra de las acciones de promovidas por la Comisión Europea ha sido destinar 50 millones de euros para subvencionar proyectos de investigación y desarrollo de la tecnología 5G, la conexión móvil de banda ancha de la próxima década.