Los voluntarios latentes son aquellos dispuestos a actuar cuando surge una emergencia. Son personas cualificadas, con una formación específica para prestar ayuda en situaciones muy concretas y que deben estar localizables en todo momento. Cruz Roja Española es una de las entidades con más experiencia en este campo. Dispone de dos grupos diferenciados: uno que actúa en el ámbito nacional y otro que lo hace en el ámbito internacional. Cada grupo está especializado en un área concreta, aunque la finalidad en ambos casos es proporcionar una respuesta “rápida, eficaz y proporcionada” a las circunstancias derivadas de una determinada emergencia.
Equipos de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE)
Cuando surge una emergencia en cualquier punto del país, los Equipos de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE) están dispuestos para intervenir rápidamente y minimizar las consecuencias del desastre. Su objetivo es proteger a las personas más vulnerables. Por ello, son uno de los dispositivos estratégicos de Cruz Roja Española para responder a las emergencias nacionales. «Son equipos entrenados y motivados que, en cuestión de horas, se desplazan de una punta a otra de la geografía», explica la organización.
Imagen: Cruz Roja
Como norma general, los ERIE han de partir hacia el lugar de la emergencia antes de 12 horas, una vez comunicada la alerta. El plazo de disponibilidad varía según la especialidad, pero el compromiso que se exige a las personas que conforman estos grupos es el de estar siempre localizables y dispuestas a intervenir en el momento de su movilización. Los escenarios de intervención son los derivados de los riesgos que contemplan los planes de emergencia, los desastres naturales y/o tecnológicos, los conflictos bélicos, las situaciones de peligro en lugares públicos, los conflictos asociados a la acción terrorista, los desastres en el transporte de viajeros aéreo, terrestre o marítimo y, en general, cualquier riesgo o situación demandada por la sociedad.
Cada especialidad cuenta con diferentes niveles para adecuar la respuesta a la gravedad del suceso
En total, estos equipos cubren un amplio abanico para dar respuesta a diferentes necesidades dentro de un mismo suceso. Por esta razón, los ERIE han depurado sus técnicas en los últimos años para constituir «una baza indispensable de la labor humanitaria de Cruz Roja Española en el siglo XXI». Cada especialidad cuenta con diferentes niveles para adecuar la respuesta a la gravedad del suceso y un número variable de miembros, con perfiles diferentes, una formación académica concreta y que asumen tareas muy precisas. Así, una vez que concluye el periodo de formación, los voluntarios deben estar disponibles para intervenir en el momento en que se active su unidad.
Áreas de asistencia
Imagen: Cruz Roja
La idea de los ERIE es formar un equipo cohesionado, en el que uno de los miembros asume las labores de responsabilidad, coordinación, apoyo y supervisión de las tareas colectivas, mientras que el resto desempeña otra función complementaria. En la actualidad, los distintos tipos de ERIE intervienen en:
- Asistencia sanitaria y clasificación de víctimas. En situaciones de catástrofes o grandes accidentes, los ERIE atienden a las víctimas, facilitan su evacuación a centros asistenciales y crean áreas seguras de espera para los heridos leves. De esta forma, ayudan a que los hospitales no se saturen y se encargan de proveer medidas básicas, de prevención y profilaxis. El plazo con que cuentan para movilizarse oscila, según el nivel de emergencia, entre 3 y 6 horas desde la recepción de la llamada.
- Intervención psicosocial. Cubre las necesidades psicológicas, sociales y sanitarias de todas las personas afectadas por una catástrofe: víctimas, familiares y/o allegados. El tiempo máximo con que cuentan los recursos humanos para llegar al terreno es de 3 horas.
- Albergue provisional. En ocasiones, una emergencia puede obligar a abandonar el domicilio o la localidad para desplazarse a un lugar seguro. La labor de los ERIE es poner a disposición de las personas afectadas los equipamientos materiales necesarios para el desplazamiento y la instalación. Los equipos tienen que estar preparados para intervenir a las 12 horas de recibir la alerta. Comunicaciones y coordinación. Su función es dotar de los medios técnicos necesarios para que los diferentes equipos se comuniquen y coordinen entre sí. Estos ERIE, que pueden asumir las tareas de mando y control de las operaciones, deben estar disponibles en un plazo de 3 horas.
- Búsqueda y salvamento en medio acuático. Se trabaja tanto en ríos, como en pantanos, embalses o lagos para ayudar a personas en peligro o encontrar a otras desaparecidas. El plazo máximo de disposición para la búsqueda es de 2 horas. Para salvamento y rescate se reduce a un cuarto de hora.
- Búsqueda y salvamento en medio terrestre. Se encarga de labores de localización de personas desaparecidas o pérdidas. Incluye operaciones de rastreo en medio terrestre y soporte sanitario. La unidad debe estar disponible antes de 2 horas para la búsqueda, antes de 1 hora para el salvamento y antes de media hora para el rescate.
Para llevar a cabo todas estas labores, los ERIE se encuentran registrados, según su especialidad, en las Oficinas Territoriales de Cruz Roja. No obstante, tienen capacidad para desplazarse a un territorio diferente al suyo, si la emergencia lo requiere.
Imagen: Cruz Roja
Los conflictos bélicos y las catástrofes que afectan a algunos países, en su mayoría localizados en África y en Asia, requieren una respuesta internacional adecuada y coordinada. Ésta es la tarea de las Unidades de Respuesta ante Emergencias (ERU por sus siglas en inglés), que atienden de manera rápida y eficaz tanto a la población afectada por estas circunstancias, como a los países vecinos, que suelen recibir a un buen número de desplazados y refugiados. Los grupos de actuación preferente son: mujeres, niños, ancianos, enfermos y personas discapacitadas.
Cada equipo de respuesta internacional cuenta con material de socorro y profesionales que deben estar disponibles para ser movilizados en 48 horas
Junto a Cruz Roja Española, en el proyecto ERU participan la Cruz Roja de Alemania, Reino Unido, Dinamarca, Bélgica, Austria, Noruega, Finlandia, Suecia y Japón. Cada ERU está compuesta por material de socorro técnico -embalado y estandarizado para su utilización inmediata- y profesionales disponibles para ser movilizados en 48 horas y para actuar en cualquier parte del mundo en un plazo máximo de una semana. Nuestro país cuenta con unidades de:
- Cuidados básicos de salud, para atender a una población de hasta 30.000 personas.
- Telecomunicaciones, para facilitar los servicios que permitan a las unidades comunicarse entre sí y con otros cooperantes.
- Agua y saneamiento, con agua de máxima calidad y saneamiento ambiental para poblaciones de hasta 20.000 personas e instalaciones de salud.
- Logística, para supervisar la recepción (aduanas), almacenamiento y distribución de los suministros.
En total, cada unidad puede actuar de manera autosuficiente hasta un mes, ya que cuenta con fondos suficientes, tiendas de campaña, alimentos y otros suministros. Todos los equipos están compuestos por entre 3 y 10 profesionales (médicos, enfermeros, ingenieros y técnicos), cada uno con una formación específica y su propio material de supervivencia, que incluye alimentos, cama, tienda, generadores eléctricos, teléfono móvil y artículos de escritorio que se transportan en contenedores ligeros. Además, a la llegada al terreno, el equipo se completa con profesionales contratados en el ámbito local, a través de las oficinas de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.