Ahorrar en los juguetes de Reyes: nueve ideas para fabricarlos en casa

Los regalos caseros, además de ser económicos, permiten a los niños participar en su fabricación y generan buenos momentos compartidos entre padres e hijos
Por Cristian Vázquez 13 de diciembre de 2012
Img juguetes caseros hechos a mano navidad crisis listado

Fabricar los juguetes de Navidad en casa hace que padres y madres pasen buenos ratos con sus hijos, lo que fortalece los lazos afectivos entre ellos. Además, esta actividad es económica y fomenta en el niño la costumbre de reciclar y reutilizar los materiales de uso cotidiano. Este artículo reúne nueve ideas para la confección de juguetes caseros, desde puzzles con palitos de helado y zancos de latas hasta animales de goma eva o camiones, coches y trenes de cartón. Juguetes anticrisis para regalar y ahorrar en Reyes y Papá Noel.

Los regalos de Navidad hechos en casa son económicos y educan la conciencia ecológica del niño
La Asociación Española de Fabricantes de Juguetes calcula que en Navidad se compra el 75% de los juguetes que se venden durante todo el año. Sin embargo, los juguetes caseros tienen su encanto, por varios motivos. Por un lado, ofrecen a pequeños y adultos la posibilidad de fabricar juntos los elementos del juego. Y estos momentos compartidos sirven para fortalecer los lazos afectivos. Por otro lado, estos juguetes se pueden confeccionar con distintos materiales existentes en casa. Y ello tiene una doble ventaja: son económicos y educan la consciencia ecológica del niño, al basarse en la reutilización de elementos.

A continuación, se explican nueve ideas para hacer juguetes navideños con materiales muy económicos y de uso cotidiano.

1. Puzzles con palitos de helado

Los puzzles hechos con palitos de helado son muy originales. Y hacerlos es tan sencillo como reunir varios palitos y luego decorarlos con un dibujo divertido, como explica el portal Peque ocio.

Además, como se pueden aprovechar ambas caras de los palitos, cada rompecabezas vale por dos. Y no hace falta ser un eximio dibujante, ya que la decoración puede ser muy simple.

2. Puzzles de madera

Un poco más complicados de realizar son los puzzles de madera que propone Blog manualidades. Para ello, es necesario contar con una tabla de madera, una sierra, témperas y rotuladores.

El número de piezas, su tamaño y el grado de dificultad deberán depender de la edad de los menores a quienes esté destinado.

3. Caballitos de madera

Los caballitos son un clásico entre los juguetes infantiles, capaces de competir con cualquier juguete moderno, más tecnológico. ¿Cómo reemplazar la fantasía de sentir el viento en la cara al montar un corcel?

El elemento básico es un palo más o menos largo, cuya extensión debe ser algo inferior a la altura del niño. La tarea consiste en dotar al caballo de una cabeza, que puede estar hecha con un calcetín relleno de lana, algodón o retazos de tela, como proponen en el sitio web Las Manualidades o en el blog Mi Hijo Único.

4. Juego de las parejas o «memotest»

Hay otros juegos clásicos, que siempre son divertidos y a los que se puede añadir el valor de que los propios pequeños hayan participado en su elaboración. Uno de ellos es el juego de las parejas o «memotest», con piezas que tienen un dibujo en una de sus caras cara. Estas se colocan boca abajo y hay que darles la vuelta por pares, con el fin de descubrir los dibujos guales.

En Navidad, un juego de parejas o memotest hecho en casa puede incluir fotografías de los niños

Las piezas se pueden elaborar con cartón, como explica el sitio web Manualidades infantiles. Las imágenes pueden ser tomadas de otras partes o crearse personalizadas: animales, frutas, cosas de la casa, personas conocidas. Los propios niños y padres pueden estar incluidos en las imágenes, lo que dota al juego de un componente extra de diversión.

5. Bingo

Otro juego tradicional para el que resulta posible confeccionar al menos una de sus partes con elementos reutilizados es el bingo, aunque sin premios económicos.

Las bolillas pueden ser tapas de plástico, en las que se pinte el número con rotulador. Eso sí, para garantizar la transparencia, todas las tapas deben ser de la misma forma y tamaño.

6. Zancos

Los zancos de latas pueden ofrecer muchos ratos de diversión (enseñan a hacerlos en Las Manualidades). Hay que tener cuidado: los más pequeños se caerán mucho al jugar con ellos. Pero cuando ya son algo más grandes, en especial sobre césped y en espacios abiertos, disfrutarán mucho de sus aventuras sobre sus zancos de latas. Además, se pueden decorar con los dibujos que más les gusten.

7. Camiones, trenes y coches

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Imagen: CONSUMER EROSKI

Fabricar camiones, trenes y coches de cartón (a partir de cajas de leche, de zumo, de zapatos, etc.) posee la magia de convertir un objeto cotidiano que suele desecharse en un juguete capaz de llevar muy lejos la imaginación.

Además de las cajas, se emplean otros materiales caseros como tapas de plástico y bolígrafos, para las ruedas del camión (como cuenta el blog L’Atelier Barcelona) o cintas y papeles de colores para adornar los vagones del tren (la propuesta es de Paper Blog. También se pueden crear auténticos bólidos de Fórmula 1 con los tubos de cartón de los rollos de papel higiénico o de cocina.

8. Reloj de arena

Un reloj de arena casero sirve para otros juegos, con tiempo limitado para actuar

Dos botellas de plástico permiten crear un reloj de arena casero como detalla Manualidades infantiles. Además de que queda muy bonito, puede servir para enseñar al niño las unidades de tiempo (horas, minutos, segundos).

El reloj de arena también funciona como un auxiliar para otros juegos, en los que cada participante tiene un tiempo limitado para tomar decisiones y actuar (ajedrez, damas o juegos de mesa).

9. Animales de juguete

La goma eva ofrece muchas posibilidades para crear, a partir de simples planchas de ese material, múltiples formas. Una opción es la de coloridos animales: búhos y gusanitos es la propuesta del sitio Cuidado Infantil.

Otro animal muy fácil de hacer es una serpiente o gusano con tapones de corcho. Basta con proveerse de una buena dosis de tapones, cortarlos y hacerles un agujero en el centro para pasar una cuerda por allí. Se pueden pintar de colores vivos para que sean más divertidos para los niños.

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