Ideas de platos refrescantes y saludables para un día de playa

Se puede diseñar un buen menú playero desde el aperitivo. Y qué mejor que combatir el calor con unas sopas frías nutritivas, como el gazpacho o el salmorejo. Los podemos llevar en botellas y colocarlas cerca de los hielos para servirlas en vasitos, bien frescas.

Tanto el salmorejo como el gazpacho se pueden comprar ya hechos, listos para consumir, o preparar en casa. Si vas a hacerlos tú, apunta:

Necesitas: 250 g de tomate muy maduro, 1,25 litros de agua, un pimiento verde pequeño, un diente de ajo, 50 g de miga de pan, 50 ml de aceite de oliva, 10 ml de vinagre y una pizca de sal.

Preparación:

• Pasa por la batidora el pimiento y el tomate hasta que quede una pasta.
• Machaca el ajo en el mortero con un poco de sal; agrega el tomate y la miga de pan mojada y estrujada.
• Mezcla este conjunto y añade el aceite poco a poco, removiendo a mano.
• Echa esta pasta en un colador puesto encima de un recipiente grande. Vierte el agua sobre la pasta, removiéndola para ayudar a que pase todo el jugo al recipiente.
• Agrega el vinagre, rectifica de sal y cuela otra vez. Solo queda trasegarlo a la botella que lleves a la playa.

Necesitars: 200 g de tomate maduro (variedad pera), 200 g de melón, un diente de ajo, 150 g de miga de pan duro, 40 ml de aceite de oliva virgen extra, 10 ml de vinagre de Jerez, una pizca de sal, unas lascas de jamón serrano y un huevo cocido que llevaremos pelado en un táper aparte.

Preparación:

• Remoja el pan en agua y escurre con la mano.
• Pon el pan en un vaso de batidora con el aceite, los tomates, el melón pelado, el ajo, la sal y un poco de vinagre.
• Bate a velocidad media-alta durante cinco minutos, hasta formar una pasta homogénea.
• Prueba de sabor y rectifica de sal a tu gusto. La pasta de salmorejo se puede aligerar un poco añadiendo agua fría, pero no debe quedar líquida, sino cremosa.
• Coloca el salmorejo en una botella y enfríalo en la nevera durante, al menos, una hora.
• Llévalo a playa en una botella. Aparte, en un táper, lleva el huevo cocido y unas lascas de jamón serrano.

Las ensaladas son platos muy sencillos y rápidos de preparar. Merece la pena hacerlas la noche anterior y llevarlas fresquitas en un recipiente hermético en la nevera portátil.

Pero es importante conservarlas sin aliñar para que no se echen a perder. El aliño (una vinagreta, por ejemplo) se lleva en un recipiente aparte para agregar en el momento de servir.

Las ensaladas de pasta, las ensaladas de legumbres o las ensaladas de arroz son muy nutritivas y variadas. Las ensaladas con frutas, como las dos siguientes, suelen ser las grandes triunfadoras de estas comidas, ya que pueden dar grandes resultados:

Necesitas: 200 g de pepino, un melocotón, un tomate maduro de ensalada, 15 g de aceitunas, 15 g de cebolletas en vinagre, 20 g de pepinillos en vinagre, 60 ml de aceite de oliva, 10 ml de zumo de limón, 10 ml de vinagre balsámico y una pizca de sal.

Preparación:

• Limpia los pepinos, pélalos y trocéalos en rodajas.
• Pela el melocotón y trocéalo en láminas finas.
• Lava el tomate y córtalo en gajos.
• Coloca estos ingredientes en la nevera, en el mismo recipiente que vas a llevar a la playa.
• Por otro lado, prepara el aliño para llevarlo en un bote de cristal. Para esta vinagreta, mezcla los encurtidos (aceitunas, cebolleta y pepinillo) troceados muy pequeños con el aceite de oliva, el zumo de limón, el vinagre balsámico y la sal.
• En el momento de servir, agita la mezcla y aliña la ensalada fresquita.

Necesitas: 300 g de garbanzos cocidos, un huevo, dos tomates, 200 g de pechuga de pollo asada, 50 g de cebolleta fresca, un diente de ajo, 60 ml de aceite de oliva, 20 ml de vinagre balsámico, 40 g de mayonesa ligera, unas hojas de perejil y una pizca de sal.

Preparación:

• Lava y trocea los tomates en cuadraditos regulares. Pica también la cebolleta fresca y el diente de ajo.
• Cuece un huevo en agua hirviendo con un poco de sal durante 10 minutos. Una vez frío, pélalo y resérvalo.
• Trocea la pechuga de pollo asada y mézclala en un recipiente con el tomate, los garbanzos cocidos y escurridos, la cebolleta fresca y el diente de ajo.
• En un bote aparte, prepara el aliño con aceite de oliva, sal y vinagre balsámico.
• En el momento de servir, aliña y agrega el huevo duro pelado y troceado.

Los sándwiches y bocadillos son otra forma de comer algo rápido, pero no necesariamente pesado ni simplón.

Además del sencillo sándwich vegetal, o el mixto, hay grandes opciones, como el bocadillo de pan integral con atún, tomate, queso y anchoas.

Necesitas: 400 g de pan integral (cuatro bollitos), 250 g de bonito en aceite, cuatro tomates raff, 250 g de queso cremoso, dos dientes de ajo, 50 g de anchoas de Santoña en conserva y 10 ml de aceite de oliva.

Preparación:

• Abre los panecillos a lo largo, vierte una cucharada de aceite de oliva y unta con unos dientes de ajo partidos a la mitad.
• Sobre cada pan unta el queso cremoso, coloca las rodajas de tomate, los lomos de bonito desmenuzados y termina con unas anchoas de Santoña en aceite.

Si hay muchas personas para comer, en vez de hacer bocadillos para todos, se puede llevar un pastel frío, ya sea de carne o de pescado, o una empanada o tarta tipo quiche.

En este caso, es conveniente una quiche de champiñones y queso: es fácil de transportar en porciones, se conserva bien en la nevera portátil y, a la hora de comerla, a temperatura ambiente queda muy bien.

Necesitas: una lámina de pasta quebrada refrigerada, 175 g de champiñones, 40 g de cebolla, 125 g de nata líquida para cocinar, un huevo, 40 g de queso mozzarella, una pizca de sal y una pizca de nuez moscada.

Preparación de la masa:

• Estira la masa con el rodillo y colócala sobre la base del molde bajo de tarta.
• Cubre con papel de horno y pon un peso encima (por ejemplo, rellenamos un bol apto para horno con arroz o judías). Así evitarás que la masa suba durante la cocción.
• Introdúcela en el horno durante 20 minutos a 180 ºC. Una vez horneada la base, quita el papel y el peso.

Preparación del relleno de la quiche:

• Pica la cebolla en juliana (tiras finas) y sofríela con un poquito de aceite de oliva. Cuando esté dorada, mézclala con los champiñones lavados y troceados en láminas, y cocina hasta que se sofrían los champiñones. Una vez cocinados, sácalos de la sartén y colócalos en un colador para que escurra el aceite del salteado.
• Mientras, mezcla la nata con un huevo batido, nuez moscada y sal.
• Une el salteado de champiñones con el preparado de nata y vierte sobre la masa ya horneada.
• Espolvorea por encima un poquito de queso rallado y hornea el conjunto hasta que se dore la superficie, a 200 ºC durante unos 10 minutos.
• Saca del horno, deja que se temple e introduce la quiche en el frigorífico hasta el día siguiente, cuando la lleves a la playa.

La mejor opción, la más práctica y nutritiva, es llevar la fruta fresca de temporada entera, si bien se pueden preparar algunas variantes a partir de la fruta, desde la típica macedonia hasta unos deliciosos batidos de frutas frescas, que son fáciles de llevar y mantener fríos en una botella.

Un ejemplo de batido muy adecuado para la playa es el siguiente:

Necesitas: 200 g de melón, 200 g de pera, 200 g de manzana Pink Lady, un limón, 300 g de yogur natural y 200 ml de leche.

Preparación:

• Pela y quita las pepitas de las frutas, trocéalas y pásalas por la batidora hasta que quede una mezcla homogénea.
• Añade el yogur natural y la leche fresca.
• Bate de nuevo, pon a punto de azúcar (si fuera necesario) y viértelo en una botella para llevar en la nevera portátil, cerca de los hielos.