La llegada de un bebé cambia la vida de sus padres. A partir de ese momento, ellos tendrán que asumir ciertas conductas y rutinas específicas para la crianza del pequeño. Pero algunas personas temen no saber cómo apañarse cuando tengan a su hijo. Para evitar esos temores, a continuación se enumera un decálogo de consejos de mamás blogueras para organizar la vida con un bebé en casa: desde preparar las cosas con antelación hasta aceptar todos los ofrecimientos de ayuda, confiar en la capacidad de adaptación del recién nacido y, sobre todo, aprender de él.
1. Los preparativos, con antelación
Cuando se presente una ocasión especial, como una salida, una reunión, una fiesta, etc., el consejo número uno es «organizarse y hacer las compras necesarias cuanto antes, para luego poder relajarse y disfrutarla en plenitud con el bebé», dice Martina Calzada Zapater, responsable del blog No sin mis hijos.
En fechas especiales, como en los cumpleaños, implica acudir a las tiendas con antelación, lo que permite, además, evitar las aglomeraciones que suelen poner nerviosos a los niños.
Zapater destaca, de todos modos, la necesidad de «asumir que, pese a haber tomado todas las precauciones, siempre surgirán imprevistos de última hora, pero que serán más fáciles de solucionar sin estrés, si el resto de cosas están resueltas».
2. Llevar lo necesario
Siempre conviene salir con todo lo necesario para el bebé, como ropa de abrigo o de recambio, pañales, comida, etc. Esto es fundamental, sobre todo ante contratiempos o cambios de planes.
3. La decoración, sin objetos peligrosos a su alcance
Los objetos de decoración peligrosos no deben estar al alcance de los pequeños, pues los adornos y luces son muy llamativos pero también peligrosos para ellos: los pueden llevar a la boca, hacer que se les caiga encima, etc.
4. Adelantar las comidas y cenas de los niños
Noelia González, una de las responsables del blog Cuestión de madres, aconseja en ocasiones especiales, como reuniones familiares, adelantar la comida o la cena de los niños, ya que «ayuda a que luego los mayores puedan relajarse».
Pero añade que también es conveniente incluir en la mesa de los adultos comida para los pequeños, «como picos de pan, queso, jamón y alguna croquetilla», ya que esto «hace que estén integrados con los mayores aunque sea solo picoteando».
5. Pijamas cuando cenamos fuera de casa
Si bien se debe procurar mantener siempre las rutinas del bebé (baño, comidas, etc.), no es un problema que, en ciertas ocasiones, el niño se duerma un poco más tarde. «Si ven fiesta, ellos también quieren fiesta«, explica Noelia González. Además, como comenta Carolina Cerini, del blog Mellimamá, ocurre que durante las reuniones familiares «el bebé tiene muchos estímulos».
Si se descubre que el pequeño está irritado o molesto, se puede tranquilizar y hacer dormir en una habitación aparte. «Si están cansados, ellos mismos piden dormir«, señala González. Así que, si se cena fuera de casa, lo idóneo es llevar el pijama y pañales. «Y es preferible que durante la salida esté un rato sin el trajecito mono, y no tener que despertarle luego para cambiarle», cuenta.
6. Regalos simples
A menudo, en los cumpleaños, cuesta mucho decidir qué regalos hacer a los bebés y niños pequeños. Sin embargo, muchas veces, ellos quieren los juguetes gratuitos mucho más que los caros, como cajas o tubos de cartón, toallas o pinzas para la ropa.
Noelia González comenta que, en su primera Navidad como madre, después de que ella y su pareja «se volvieran locos» buscando el mejor regalo, al niño lo que más le gustó fue el papel del envoltorio. Por eso, recomienda relajarse también en este sentido. «Ya serán mayores y sus listas de regalos, kilométricas», explica.
7. Aceptar la ayuda de los demás
Cerini destaca la importancia de aceptar siempre la ayuda de los familiares y amigos que estén cerca y la ofrezcan. Esta es una regla general durante la crianza de un bebé y, sobre todo, enfatiza esta mamá bloguera, cuando se tienen gemelos o mellizos, como es su propio caso. Cualquier ayuda, en esa situación, vale oro.
8. Aprovechar el balanceo del coche
Jenni Peña, bloguera responsable de Babbupi, califica el balanceo del automóvil como un «somnífero natural«. Por eso, si se ha salido con el niño y el regreso a casa es en coche, se puede aprovechar para que se duerma.
9. Confiar en la capacidad de adaptación del bebé
Las dudas y temores que aparecen con la llegada de un hijo pueden conducir a la sobreprotección, uno de los errores más frecuentes cuando se educa a un niño. Peña aconseja dejar de lado esa sensación de querer encerrar al bebé en una urna o, incluso, meterse en la misma urna los padres con él. «Los niños tienen una plasticidad pasmosa y se suelen acoplar a cualquier circunstancia. A veces somos los padres a los que nos cuesta habituarnos a esta nueva vida«, dice.
10. Aprender del bebé
Por último, la recomendación es estar tranquilos y aprender del propio bebé: observarle, estar con él, acompañarle y conocerle. «El mejor maestro siempre es la observación. El mejor consejo es el que nos da el nuevo miembro de la familia. Solo hemos de ver qué nos está pidiendo y hacer lo que creamos conveniente«, concluye Peña.
Lea más artículos de Bebés.