Una ducha sin barreras arquitectónicas. Ésta es una de las propuestas más novedosas para el cuarto de baño: platos extraplanos que facilitan el acceso a las personas mayores y con movilidad reducida, combinados con desagües de apenas unos centímetros que eliminan los desniveles tradicionales para salvarlos.
Con este diseño, el plato queda encastrado en el solado, a ras del suelo. Se trata de modelos que ocultan sumideros de unos cinco centímetros de alto, en contraposición con las medidas habituales de estos. Los sistemas más extendidos requieren elevar los platos a partir de un mínimo de diez centímetros para ocultar el sifón.
Cómo evacuar el agua
Las duchas de obra aumentan el espacio disponible en el baño. Sin embargo, hasta ahora su instalación ha estado restringida debido a los inconvenientes a la hora de evacuar el agua. Si se producen problemas de filtración o atascos, se corre el riesgo de inundar el baño.
Se instalan rejillas o pendientes de evacuación que dirigen el agua hacia el desagüe
Para subsanarlo, los nuevos platos cuentan con rejillas laterales o pendientes de evacuación que dirigen el agua hacia el centro del plato o hacia la pared. Además, la instalación se completa con una lámina impermeabilizante que cubre también los bordes para garantizar la estanqueidad en todo el perímetro.
Estos sistemas quedan cubiertos por las mismas baldosas que el resto del solado, por lo que no se aprecian los límites de la ducha. Hay platos de diferentes medidas para adaptarse a cualquier entorno. Su instalación es sencilla y se completa con una mampara que impida la caída de agua al resto de la estancia.
Cuando se aprovechan las obras de reforma del baño para cambiar las tuberías, es conveniente instalar una llave de paso que regule la entrada de agua al cuarto, así como una llave de corte en cada sanitario. De esta forma, si ocurre una avería, no será necesario cortar el agua de toda la casa para repararla.
Es aconsejable, además, que las tuberías discurran lejos de la línea eléctrica. Se puede dibujar el proyecto sobre un plano para recoger el lugar exacto por el que van los conductos y, así, consultarlo si surge cualquier avería o es necesario detectar la procedencia de una fuga.