Las pinturas con acabado arenoso son una opción muy actual para decorar las paredes con texturas originales y llamativas. Este tipo de pintura es perfecta para disimular las irregularidades e imperfecciones de los muros. Sencilla de aplicar, se puede utilizar sobre todo tipo de superficies, incluso sobre el gotelé.
Pintura con efecto arena
Las pinturas con efecto arena son una buena opción para decorar las paredes con superficie irregular. Con este tipo de acabado se consigue dotar a las paredes de un aspecto mucho más moderno que con la tradicional técnica del gotelé, e incluso se puede aplicar sobre éste.
En el mercado se pueden adquirir pinturas ya preparadas en una amplia gama cromática, que permiten dar color a la pared con una textura y un acabado arenoso y tacto granulado muy actual.
Una sencilla aplicación
Para aplicar la pintura las paredes deben estar limpias, sin restos de suciedad ni polvo. Si la superficie está en mal estado se aplicará una base de pintura plástica de color blanco.
Para un buen acabado, la pintura se debe extender en diferentes direcciones con movimientos en forma de cruz
A continuación, se remueve la pintura con una espátula y, una lista, se introduce una brocha plana de pelo natural y se carga con pintura hasta alcanzar dos dedos de espesor.
Para un buen acabado la pintura se debe extender en diferentes direcciones con movimientos en forma de cruz. Cuando ya no quede pintura en la brocha hay que aprovechar para repasar y homogeneizar la superficie pintada.
Para renovar y dar un toque de sofisticación al clásico efecto arena se puede añadir a la pintura un colorante metalizado. La cantidad de pigmento utilizado aportará un toque más o menos brillante y metálico al acabado.
Para dar un toque de sofisticación al clásico efecto arena se puede añadir a la pintura un colorante metalizado
Una buena forma de evitar errores y acertar con la mezcla es tomar pequeñas porciones de pintura arenosa y añadir distintas porciones de tintura hasta dar con el acabado deseado. Para no manchar la pared, se puede probar la pintura sobre un cartón.
También se puede conseguir un efecto metalizado si se aplica una mano de barniz de acabado escarcha sobre la superficie pintada y seca.
La pintura arenosa también aporta un toque decorativo a las distintas estancias si se aplica en una sola pared y el resto se pinta con pinturas lisas.