En las estaciones lluviosas, como la primavera, las goteras salen a la luz. Las grietas en la cubierta, el desplazamiento o la rotura de las tejas son los principales motivos por los que se originan molestas filtraciones de agua en los techos que limitan con las cubiertas. Para atajarlas, es fundamental localizar el punto exacto del que proviene la gotera y efectuar de inmediato el arreglo. Así se evitan daños más graves en la estructura del inmueble. En la mayoría de ocasiones, es suficiente sustituir la teja rota o deteriorada y aplicar emulsión asfáltica sobre la cubierta para reforzar su estanqueidad.
Cambiar las tejas
El viento, un deficiente mantenimiento del tejado o el peso de la nieve ocasionan desplazamientos y roturas en las tejas que lo componen. Para sustituir los elementos deteriorados, es conveniente utilizar unos calces biselados. Esta herramienta auxiliar facilita la tarea, ya que permite mantener las tejas de la hilera superior elevadas mientras se cambian las piezas rotas. Se deben retirar por completo los restos de los elementos dañados y fijar de forma correcta las nuevas tejas. Una vez que el cambio se ha efectuado, se retiran los calces.
Esta forma de proceder se emplea para las tejas mixtas (también conocidas como mecánicas o de encaje), que se colocan en hilera y se encajan entre ellas gracias a las acanaladuras de sus bordes, y para las de tipo plano que no están clavadas.
En cualquier caso, antes de colocar la nueva pieza, se recomienda comprobar el estado de mantenimiento en el que están los listones del tejado. En el momento de retirar las tejas deterioradas, se pincha con un punzón la estructura. Si el utensilio se hunde en la madera, el armazón está podrido o en fase avanzada de deterioro. Cuando esto ocurre, la reparación es más compleja ya que se debe restaurar por completo esa parte.
Taponar grietas
Las grietas en los tejados con azotea son otra causa de goteras en los techos
Las grietas en los tejados con azotea son otra causa de goteras y filtraciones en los techos. La mayoría se localizan en los ángulos con las paredes. Si el desperfecto es poco profundo, se debe limpiar y taponar con emulsión asfáltica. Las bandas hidrófugas o bituminosas son otra solución. Es un producto que se comercializa en un formato similar al de la silicona y en distintos colores para que pase inadvertido. Para una correcta aplicación, deben agrandarse las grietas, limpiarlas con una rasqueta y distribuir sobre ellas el producto.
Si las fisuras son de un tamaño considerable, no basta con taponarlas. Es preciso sellarlas con cemento que disponga de un agregado impermeabilizante. Una vez que el material se fragüe, se aplica la emulsión asfáltica en varias capas hasta nivelar la superficie.
Otros elementos que contribuyen a mantener la estanqueidad de la cubierta son los canalones. La función de estos conductos es recuperar las aguas pluviales. Al mismo tiempo, acumulan también una gran cantidad de suciedad. Hojas, ramas y musgo son los principales residuos que se amontonan en ellos. Es posible retirarlos desde el propio tejado con una escobilla.
Para eliminar los hierbajos y el musgo depositado en estos desagües, se recomienda utilizar una azadilla. Conviene prestar atención especial a las plantas trepadoras, ya que no son inofensivas. Después de invadir los canalones, se instalan en la cubierta y llegan a levantar las tejas. Se deben eliminar con una podadera.