Disfrutar del verano es la máxima que todos nos marcamos cuando llegan las vacaciones estivales. El problema es que muchas veces esas ganas hacen que nos volvamos un tanto imprudentes y corramos determinados riesgos innecesarios. Así lo señala el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm), entidad que advierte sobre las zambullidas imprudentes en ríos, pantanos o en el mar, así como sobre el uso excesivo de tabletas y videoconsolas o la exposición directa a los chorros del aire acondicionado. En este artículo explicamos cómo prevenir estos riesgos habituales del verano.
El peligro de zambullirse de cabeza en cualquier sitio
Las inmersiones de cabeza en pantanos, lagos, ríos o en el mar implican un alto riesgo de impactar contra el suelo o contra una superficie dura, provocando lesiones neurológicas irreversibles como la paraplejia y la tetraplejia. «Incluso cuando el lugar de baño se conoce, el riesgo de impacto es alto, ya que el suelo de la superficie de agua puede variar según corrientes o mareas», alerta el secretario del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm), José Santos.
Recuerda este experto también la importancia del calentamiento antes de hacer ejercicio y del estiramiento después del mismo, sobre todo en el caso de aquellas personas que no están acostumbradas al ejercicio físico y que aprovechan los meses de verano o las vacaciones para practicar deporte en la playa.
Además hay un punto especial aquí, y es que aquellas personas que practican deporte en la arena tienen un alto riesgo de sufrir problemas lumbares, esguinces de tobillo, fascitis plantar, periostitis tibial o, incluso, fracturas por sobrecarga en la región del metatarso del pie en el caso de no tomar las precauciones necesarias. Por este motivo, los fisioterapeutas aconsejan que, si se correrá en la playa, debe hacerse en la zona de arena dura y sin pendiente, ya que el desnivel del terreno puede provocar sobrecarga en determinadas partes de la espalda, y siempre con zapatillas de deporte, nunca descalzos.
En el caso de llegar a producirse una lesión, Santos incide en la necesidad de ser tratado por un verdadero profesional sanitario. «En ningún caso hay que someterse a los supuestos tratamientos que dicen realizar ciertos masajistas que ofrecen sus servicios en la misma playa y que ejercen su actividad sin título homologado por Sanidad y sin los más mínimos requisitos de seguridad o higiene», insiste.
Jugar con tabletas y videoconsolas tiene sus normas
Durante el verano prolifera también el uso de dispositivos como las tabletas o las videoconsolas. Para evitar sufrir dolores de cuello o espalda derivados de su utilización, el secretario general del Cpfcm recomienda, en el caso de las tabletas, usar soportes de sujeción para leer, teclado portátil para escribir y evitar las posturas incorrectas durante su empleo.
En cuanto a los teléfonos móviles, José Santos aconseja no sujetarlo con el hombro mientras se habla y utilizar auriculares si se tienen que manipular otros objetos durante la conversación. Además, alerta sobre el sobreesfuerzo al que se puede ver sometida tanto la zona vertical como el pulgar, al escribir de forma prolongada a través de las pantallas táctiles de los dispositivos móviles.
En cuanto al uso de videoconsolas, recuerda que lo recomendado es no pasar más de dos horas al día jugando y que se debe descansar diez minutos por cada hora de juego. Además, si se trata de juegos deportivos, es aconsejable calentar y estirar antes y después del ejercicio, además de elegir el juego en función de las edades y el estado físico de los jugadores.
Cuidado con los chorros del aire acondicionado
El experto apunta también que el contacto directo del aire acondicionado con el cuerpo, especialmente con la espalda o la cara, puede producir distintas contracturas musculares, lumbalgia y cervicalgias. Así, explica que «es importante que la piel y la musculatura no reciban el chorro directo de aire frío mientras se está trabajando, conduciendo y, especialmente, mientras se está durmiendo».
Además, asegura que la falta de limpieza de los filtros del aire acondicionado puede provocar problemas en las vías respiratorias tales como faringitis, típicos resfriados, infecciones respiratorias como la «enfermedad del legionario» e incluso problemas gastrointestinales. «Es imprescindible realizar un buen mantenimiento de los equipos de aire acondicionado para evitar este tipo de patologías», puntualiza.
Consejos para una conducción saludable
En relación a los múltiples desplazamientos que se realizan por carretera durante estas fechas, Santos recuerda que si se viaja con un niño, el asiento más seguro del coche es el trasero central, por lo que se recomienda instalar en él un sistema de sujeción específico para el menor, que debe estar adaptado a su peso y edad.
Asimismo, aconseja a los conductores verificar la altura y la distancia del asiento, de manera que los pies puedan pisar a fondo los pedales de embrague, freno y acelerador, sin necesidad de inclinar o desplazar el cuerpo hacia delante. Además, recomienda adaptar el respaldo de manera que la inclinación del conductor sea lo más perpendicular posible y mantenga una distancia de por lo menos 25 centímetros respecto del volante, descansar cada dos horas y aprovechar estas paradas para hidratarse y hacer estiramientos de piernas, tronco, brazos y muñecas, para evitar contracturas y lumbalgias.