Reír mejora la salud. En algunos casos, sin embargo, puede suceder todo lo contrario. Un 2% de la población sufre gelotofobia o miedo a que se rían de ellos. Algunos de los síntomas son: sudoración, inseguridad, timidez, tristeza, mareo, temblores, preocupación excesiva e, incluso, aislamiento social o depresión. Este artículo se describe qué es la gelotofobia o miedo a la risa ajena, cómo se evita el miedo que provoca y por qué se relaciona con vergüenza, inseguridad y complejo de inferioridad.
Gelotofobia proviene del griego gelos (risa) y fobos (miedo). Se sabe poco de este nuevo concepto, que se refiere al miedo a la estrés que se manifiestan en forma de torpeza, tensión y comportamiento ridículo.
Una de las principales formas de cohesión en grupos de jóvenes es la risa. En esta edad, “lo diferente” da miedo, ya sea por ignorancia o por desconocimiento. El adolescente considerado “raro” es quien no sigue las normas del grupo o las características de unión, como las diferentes preferencias de música o vestir de un modo diferente al resto. Estos contrastes provocan la impresión de ridiculez en los miembros del grupo que conocen y siguen estas normas. La agradable sensación de satisfacción que produce la pertenencia a la mayoría se exterioriza mediante la risa contra quien no las sigue.
En situaciones extremas, cuando estas actitudes tienden a ser agresivas, intencionadas y repetitivas, culminan en el acoso escolar (bullying). La intimidación hace sentir a la víctima dolor, angustia, miedo e, incluso, puede tener consecuencias devastadoras, como quitarse la vida.