La madera es un material presente en utensilios domésticos de cocina, como cucharas otablas. Se trata de un material poroso en el que con facilidad pueden producirse grietas o cortes. En este caso, el riesgo está en que en estas zonas de difícil acceso pueden acumularse restos de alimentos y humedad, lo que las convertirría en un foco de crecimiento de microbios. Por eso, es un material que no está autorizado en cocinas profesionales. Y, en el ámbito doméstico, su uso debe pasar por una rigurosa limpieza y desinfección. El artículo explica cómo manipular los utensilios de madera como las cucharas y qué otros materiales pueden encontrarse en las cocinas.
Tablas de cortar, cucharas o espátulas de madera son utensilios muy tradicionales en las cocinas domésticas. Pero debe tenerse en cuenta, sobre todo en el caso de las superficies donde se corta, que el cuchillo provoca ranuras donde pueden acumularse restos de alimentos e, incluso, bacterias. Además, este material, al ser poroso, absorbe el olor de los alimentos que se manipulan sobre él. Igual que otros materiales presentes en la cocina, como la arcilla, la madera tiene ventajas e inconvenientes; solo deben conocerse bien para saber cómo utilizarlos y limpiarlos.
Cómo manipular los utensilios de madera
El cuidado y la limpieza de los utensilios de madera difieren de otros utensilios hechos de plástico o metal. Y es que la madera se expande en agua, por lo que dejarlos en remojo es poco recomendable.
También es importante que la madera con la que se fabrica el objeto sea dura. Las maderas blandas, como el pino, absorben demasiado los aceites y los jugos que se cocinan. Por eso, es aconsejable que la madera sea de roble, arce u olivo.
Otras recomendaciones para un empleo seguro de los utensilios de madera son las siguientes:
No introducirlos en el lavavajillas porque las altas temperaturas aceleran su deterioro.
Por sus características, es fundamental una profunda limpieza y desinfección. Se hará con un fregado a mano normal para retirar restos de alimentos, se enjuagará, enjabonará y aclarará con agua. Deben secarse bien con un trapo limpio y dejarlos secar completamente antes de guardar.
No deben dejarse en remojo con agua porque se facilita el crecimiento bacteriano.
La acumulación de restos de comida orgánica aumenta el riesgo de contaminación, por tanto, debe evitarse.
Cucharas o espátulas se limpiarán a fondo después de usar con alimentos crudos.
Las tablas de madera es aconsejable lijarlas de vez en cuando y limpiarlas bien. Todo ello ayuda en la prevención de patógenos como Staphylococcus aureus o Salmonella.
Para mantener las cucharas como nuevas y alargarles la vida, pueden frotarse con aceite mineral de calidad alimentaria. También es recomendable colgarlas para que se sequen.
Si aparecen grietas o alguna parte de la madera se oscurece, es aconsejable deshacerse de la cuchara, porque podría significar que la madera se pudre y empieza a retener bacterias, sobre todo E. coli.
Pese a los inconvenientes, las cucharas de madera tienen algunas ventajas frente a otros materiales a la hora de cocinar: además de que no rayan la superficie de cazuelas, permiten un «trato» mejor a los alimentos ya que impiden que se rompan cuando se manipulan. En el caso de las tablas, este material aporta la rigidez necesaria para realizar cortes sobre ella, pero es lo bastante blando para que el cuchillo no se deteriore tan rápido. Otras ventajas de las cucharas de madera son:
No reaccionan químicamente con los aluminio (prohibido en algunos países), aunque se oxidan si no se secan bien y pesan mucho, se han utilizado de forma generalizada por su capacidad para mantener en calor durante mucho tiempo.
Los cuchillos fabricados con titanio duran más, no son tóxicos y no reaccionan con los alimentos.
Por último, la silicona es un material con una importante presencia en las cocinas en los últimos años. Este material se emplea sobre todo para la fabricación de moldes para pastelería, envases para una cocción al vapor, tapas para cerrar botes o cubiteras para hielo. La silicona tiene una importante capacidad antiadherente. Es flexible y resistente a temperaturas que van de los -60 ºC a los 260 ºC. Es importante no exponer el material a fuentes directas de calor, ni cortarlo.
Migración de sustancias indeseadasTodo material que entra en contacto con alimentos debe garantizar que no se producen migraciones de cualquiera de las sustancias que forman parte de él. La migración de sustancias indeseadas, sea cual sea el material, se controla a través del límite de migración global (LMG), que se aplica a todas las sustancias que pueden migrar, y del límite de migración específica (LME), que se establece a partir de la ingesta diaria aceptable (IDA) o la ingesta diaria tolerable (IDT) que propone el Comité Científico de Alimentación.